Urgen políticas públicas con perspectiva de inclusión y equidad
MORELIA, Mich., 2 de abril de 2019.- Al señalar que las dinámicas de desigualdad, soportadas en estereotipos culturales, han contribuido a la generación de un estado de injusticia social, que se origina en la falta de reconocimiento de la ciudadanía, y tiene como consecuencia el no ejercicio pleno de derechos, especialistas señalaron la urgencia de políticas públicas con perspectiva de inclusión y equidad.
Así lo expuso Nadia Sierra Campos, especialista en los sistemas internacional e interamericano de derechos humanos, al señalar que el binomio ciudadanía y derechos constituyen la puerta de acceso a una serie de derechos fundamentales, de los que en la actualidad son excluidas personas con alguna discapacidad, de talla grande, de talla baja, de la comunidad LGBT, morenas, indígenas, entre otras que son diferentes al patrón exigido.
Subrayó la necesidad de derribar estructuras arquetípicas que configuran estereotipos sobre los cuales se sostienen, justifican y normalizan dinámicas de desigualdad que se replican y derivan en entornos de injusticia social, y en lo cual, por acción u omisión, también han sido factor políticas públicas ineficaces.
En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, Sierra Campos impartió la conferencia Igualdad y Ciudadanía, donde hizo hincapié en la urgencia de reconocer las diferencias, tanto aparentes como no visibles a simple vista.
Ejemplificó en el error institucional de la exigencia de acreditar un domicilio para tener derecho a una credencial de elector, al que una persona indigente normalmente no tendría acceso, y en consecuencia, quedaría vetada de todos sus derechos, como a la salud y otros.
En la sede del Instituto Electoral de Michoacán, mencionó que un replanteamiento de los paradigmas de la otredad contribuirán a la reivindicación del principio de igualdad para el deseable y pleno ejercicio de las libertades.
Subrayó que para tal replanteamiento que permita llegar al pleno ejercicio de libertades, será necesario reconocer, demandar y ejercer el derecho de ciudadanía, que va más allá de portar una credencial de nacionalidad mexicana, de votar, ser votado, etcétera, sino del acceso que esa identidad da al amplísimo abanico de derechos.
Sierra Campos subrayó que no se trata del plástico, sino de todos los derechos a que constitucionalmente se tiene derecho a garantías jurídicas, civiles, penales, culturales, económicos y sociales.
La especialista concluyó que el aparato institucional debe de operar políticas públicas que garanticen el acceso la justicia social, para lo que será indispensable erradicar las estructuras culturales que alimentan la desigualdad y la discriminación.