Terrorismo ahora se ensaña con objetivos blandos
CIUDAD DE MÉXICO, 28 de mayo de 2017.- Un estadio en Manchester, una sala de conciertos en París, una discoteca en Orlando, una feria navideña en Berlín… La mayoría de los últimos atentados en países occidentales tienen algo en común: están realizados en espacios comunes con una infraestructura mínima y con alta presencia de gente.
Los ataques a lugares con poca o nula seguridad se han convertido en objetivos terroristas. Son los denominados “objetivos blandos”. “Cualquier encuentro de
gente es un objetivo potencial. Los objetivos blandos son ahora preferidos, ya que tienes menos opciones de ser detectado”, detalla a El Universal Kenneth Gray, experto en Justicia Criminal de la Universidad de New Haven.
El analista recuerda que el Estado Islámico ha recomendado a través de uno de sus órganos de comunicación, la revista Inspire, que aquellos que quieran llevar a cabo un ataque “usen ítems comunes y poco convencionales como cuchillos, coches y camiones”.
“No todo el mundo tiene acceso a explosivos, pero cualquiera puede robar un coche y atropellar peatones o agarrar un cuchillo y atacar individuos”, reflexiona Gray.