Preocupa a líderes migrantes de Michoacán renegociación de TLC

MORELIA, Mich., 29 de julio de 2017.- Tras señalar que el gobierno de México se sigue viendo débil ante las políticas anti migratorias del presidente estadounidense Donald Trump, líderes migrantes de Michoacán advirtieron que la regulación de la mano de obra es un aspecto que se debe vigilar en la renegociación del Tratado de Libre Comercio (TLC).
El 19 de agosto concluye el periodo de 90 días de consultas convocado por el gobierno de Trump para la revisión del TLC. Actores políticos ya advierten la necesidad de “cerrar filas” en torno a los términos de la renegociación en la que se ha llegado a advertir una reconfiguración del modelo económico del país.
En entrevista con Quadratín, el presidente de la Federación de Clubes de Migrantes en Illinois, Artemio Arreola, comentó que debe ser fundamental en esta renegociación la regulación de la mano de obra, porque actualmente Estados Unidos está cambiando las políticas migratorias, que dejarán de estar sujetas a aspectos familiares, y que se sujetará a méritos académicos.
Explicó que lo anterior significa que gente más preparada va a poder migrar para poder tener mejores puestos de trabajo en Estados Unidos, y eso le va a tomar una gran desventaja a México, porque su sistema educativo no es competitivo con el mundo.
Aunado a ello, señaló que el discurso del muro es un distractor, ya que en los hechos ese límite fronterizo tiene 13 años construyéndose, por lo que ese planteamiento constituye una bandera retórica que no permite ver que se están entregando fondos para infraestructura carcelaria, que es más preocupante.
“Está bajando más fondos para los centros de detención, y ese es un negocio privado; está bajando recursos para contratar a nuevos agentes de detención que colaboren con policías estatales y municipales en diferentes estados”, advirtió, al señalar que la mayoría de los estados respalda esta coordinación encaminada a radicalizar las detenciones contra la comunidad migrante.
En su opinión, el presidente Enrique Peña Nieto “se ha dejado comer el mandado” en la retórica, ya que ha guardado silencio en momentos donde ha tenido que levantar la cara y la voz, por lo que a su parecer se ha visto sumiso; “se ha visto débil, y eso manda un mensaje de eso, de debilidad, al menos así lo vemos desde acá”, comentó.