Manifiesta Arquidiócesis apoyo a paro nacional del 9 de marzo
MORELIA, Mich., 1 de marzo de 2020.- El arzobispo de Morelia Carlos Garfias manifestó su apoyo al paro nacional del próximo nueve de marzo, en protesta por la ola de violencia contra las mujeres y los feminicidios y aclaró que las mujeres religiosas o las seglares que trabajan para el Episcopado Mexicano están en libertad de participar o no.
El jerarca de la Iglesia Católica señaló que con la misma libertad que las mujeres hacen la propuesta del paro, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) está libertad de apoyar o no el movimiento y ya decidieron apoyar.
Refirió un comunicado de la CEM en el que los obispos de México dicen levantar la voz para dar palabra al dolor y a todos los afectados por él, pues el dolor que no habla gime en el corazón hasta que lo rompe.
“Deseamos ubicarnos desde la fe para que ofrezcamos presencia en palabras, diálogo y encuentro para abrirnos a la compasión. El grito de dolor de las víctimas de las violencias clama al cielo por justicia. Los cristianos no podemos permanecer indiferentes. Nos urge el celo profético de Jesús de Nazaret”.
Los obispos de México consideran que la realidad nos hace enfrentar una emergencia educativa pues se han perdido los referentes básicos de la convivencia humana: la verdad, la bondad y la belleza.
“En México tenemos una visión muy estrecha de la educación pues suele reducirse al marco de la institución escolar. No negamos la importancia de ella, pero no es suficiente, Reconocemos la necesidad de una base educativa que implique la vida familiar. La indispensable instrucción sobre las ciencias, con la conciencia de que las disciplinas que se presentan en las escuelas no pueden sustituir la educación que la familia puede dar.
“La urgencia de justicia, paz y misericordia tiene que traducirse en estilos de vida y de desarrollo humano que posibiliten una vida digna para todos. Hoy, toda acción social, económica y política tiene que transformarse en un eje central de bienestar de la persona, antes que ideologías, discursos o estadísticas.
“Todos somos corresponsables de resolver la crisis de humanidad que enfrentamos: la familia, la escuela, los medios de comunicación, las iglesias -entre otros- somos actores sociales que tenemos una responsabilidad en la misión de forjar una cultura de esperanza y de paz. Nuestros esfuerzos están invitados a sumarse a la responsabilidad del Estado en procurar la justicia y, con sus políticas pública, respaldar la cultura de la Esperanza y la paz”.