Héctor, con fe acude a agradecer a la Virgen de Guadalupe
MORELIA, Mich., 11 de diciembre de 2024.- Son días de fe y de esperanza para muchas personas por la proximidad del 12 de diciembre, día dedicado a la Virgen Morena de México, a la Virgen de Guadalupe. Ya por la calzada fray Antonio de San Miguel, también conocida como calzada San Diego, hay personas cumpliendo las mandas que una vez prometieron por milagros concedidos.
La dura piedra de cantera con la que está construida la calzada, es en estos días, más que un paso cotidiano para muchos el pago a través del sacrificio, es el agradecimiento a la Virgen Morena y la oportunidad de sanar el alma. Este camino de peregrinos que va directo al santuario guadalupano, al templo de San Diego.
Entre el tumulto de gente, va Héctor, un hombre de 49 años quien dice que su razón de estar ahí es pagar un favor. La promesa fue acudir el 11 de diciembre a realizar su manda, "lo que yo le pedí (a la Virgen de Guadalupe) me lo concedió, y pues es cumplir, es tener fe, es agradecer y ser congruente; si pido, toca también dar. A veces les pedimos cosas difíciles, creo yo, a la Virgen o a Dios, se les piden las cosas imposibles, las cosas que no están en nuestras manos, y hay que abandonarnos en ellos", manifiesta visiblemente cansado.
Cuando nació Héctor, cuenta, su madre falleció en un trabajo de parto al año y medio. Era muy pequeño y no la conoció. Su hija pasó por algo parecido... cuando dio a luz se puso grave y el hombre, por el profundo amor a su hija, ofreció su manda por el milagro de mantener a su hija con vida, "y aquí estamos, todos de pie", expuso Héctor, conmovido, y asegura que es su propia hija quien le está ayudando, moviendo las cobijas, a llevar a cabo este sacrificio.
Más atrás, a la mitad de la calzada, van tres mujeres cumpliendo su promesa. Van hincadas y sus familiares les van moviendo unos cobertores para no lastimarse demasiado las rodillas.
Una de ellas, Iraní, expone que cada vez desde hace 15 años, acude a hacer este sacrificio, esta manda para la Virgen de Guadalupe, "es más que nada un agradecimiento porque todos estemos bien este año", asevera y asegura que continuará por los siguientes años con esta manda hasta que ya no pueda. Las otras mujeres que la acompañan también son de su familia.
En el caso de Horacio, el hombre todos los años acude al templo de San Diego a pagar una manda a la Virgen de Guadalupe. La razón, expone, es la mucha fe que le tiene a la Virgen Morena. Ya cumple 25 años realizando esta actividad.
Cuenta que tuvo cáncer de páncreas hace tiempo y se curó, por esta razón empezó a cumplir con estas mandas año con año, y por el deseo de que su familia esté bien. El hombre de 49 años asegura que seguirá haciendo esto hasta que pueda, hasta que su físico se lo permita.
Dice que en febrero del siguiente año va a realizar otra manda la cual será caminando en la peregrinación a la iglesia del Cristo Negro en Carácuaro, ahí puede durar de 18 a 20 horas caminando desde Tacámbaro, expone Horacio, y solo tomar algunos descansos para cumplir con esa encomienda.