Festival del Pozole: el Buen Fin de la gastronomía michoacana

MORELIA, Mich., 18 de noviembre de 2017.- El Buen Fin no ha llegado aún a Álvaro Obregón, lugar donde se desarrolla el quinto Festival del Pozole, al cual a pesar de que se esperaba la afluencia de alrededor de seis mil personas, hasta las 18 horas de este sábado, un poco menos de mil se ha deleitado con la gran variedad de platillos que los lugareños pusieron a la venta.
Son alrededor de 18 puestos los que se han instalado en los alrededores de la plaza principal, en los que se puede consumir uchepos, tamales, tacos, buñuelos y atole, aunque el invitado de honor en las mesas es el tradicional pozole.
De camarón, mariscos y menudo o los típicos, verde, blanco y rojo, son los pozoles que se pueden comprar en este evento que se lleva realizando cinco años y al cual en otras ediciones a estas horas raramente se podría encontrar un lugar, o el fin de las filas para adquirir este delicioso platillo de la comida típica mexicana.
Desde combos de un plato con su respectiva agua de sabor en 35 pesos, hasta comidas para una familia completa en poco menos de 130 pesos, son las promociones que se pueden encontrar a solo 30 minutos de la capital michoacana.
Gloria Posadas, habitante de este municipio, se unió a este evento que ya es tradición en Álvaro Obregón, brindando pozole rojo de cerdo a 25 pesos, informó que el primer día de esta festividad se esperaba la llegada de al menos seis mil personas.
Con tristeza, ella junto a su marido ven como la llegada de los paseantes es mucho menor a otros años, aunque esperan que el domingo, último día de este magno festival, se mejore, “no perdemos las esperanzas de que vengan los cinco mil que faltaron hoy”.
José Ángel López, habitante de Morelia, se sintió asombrado por la poca cantidad de paseantes en Álvaro Obregón, “Yo tengo tres años viniendo a este evento y a estas horas cada año ya no había qué comer, iba de puesto en puesto, buscando uno donde todavía pudieran adquirir un plato de pozole, eran contados los lugares que todavía tenían”.
Aún con la baja de llegada de turistas, no se pierde el ánimo, la música y los bailables continúan, los comerciantes siguen invitando a las personas que llegan a deleitarse con un plato o dos.
“Pásele, pásele, todavía hay pozole, tenga un Buen Fin comiendo en Álvaro Obregón”, es lo que se escucha en los puestos que aún tienen lugares disponibles.
No obstante la baja en las expectativas no hace decaer el ánimo ya que aún queda un día más de este festival, al cual invitan todos los nativos del municipio más cercano al Aeropuerto Internacional de Morelia.
Cabe mencionar, que la gastronomía, danza y música, así como la calidez de este pueblo esperarán hasta el último visitante que llegue el domingo a disfrutar la rica comida que está hecha por manos michoacanas.