Contralores a modo, sin recursos ni autonomía alimentan corrupción: SEA
MORELIA, Mich., 28 de julio de 2018.- Integrantes del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) consideran que hay tres aspectos que urge modificar en Michoacán para revertir dinámicas de corrupción en la administración pública: los criterios y métodos de designación de los contralores municipales, dotar de un presupuesto suficiente a las contralorías y garantizar su plena autonomía.
En entrevista con Quadratín, el presidente del Comité Ciudadano del Sistema Estatal Anticorrupción, Rafael Villaseñor Villaseñor, señaló que la encuesta de la asociación Transparencia Mexicana realizada a contralorías municipales, evidencia en sus resultados preliminares 2018, que la entraña de la corrupción está precisamente en estos organismos.
“Esto nos viene a revelar datos que ya hemos manejado, los principales actos de corrupción que se acreditan están en las contrataciones, adquisiciones y obra pública, por ello hemos insistido en Michoacán en que es importan te armonizar las leyes locales con las federales, a fin de que haya mayor transparencia en las licitaciones y evitar adjudicaciones directas”, dijo.
Destacó que la ausencia de un marco normativo de vanguardia en Michoacán se traduce en la falta de sistemas y plataformas digitales como CompraNet para garantizar transparencia en los procesos de adquisiciones y contrataciones, principalmente cuando se trata de recursos estatales.
A lo anterior se suma la instauración de contralores a modo, además de que tienen muy poco personal, llegan a verificar lo que se hizo en trienios pasados y no a fiscalizar la administración a la que ellos mismos pertenecen, por lo que llegan a configurarse en perfiles subordinados a la misma instancia que se supondría que tendrían que fiscalizar.
Contralores pusilánimes: “mi presidente”
“Son contralores a modo, no fiscalizan a la administración de la que ellos mismos dependen, y a veces encontramos perfiles realmente pusilánimes en relación con el presidente municipal en turno, es casi normal que incluso llaman al edil en turno ´mi presidente´, lo que es una realidad, lo que no implica que sea correcto”, comentó.
Ante esto, Rafael Villaseñor señaló la urgencia de que se modifique el marco normativo de designación de las contralorías, a efecto de que se constituyan en instancias con una verdadera autonomía de gestión, y que su cargo no se vea en riesgo por las decisiones que tomen: como acudir a realizar a tal o cuál institución alguna auditoría.
A lo anterior sumó la necesidad de que las contralorías accedan a un mayor presupuesto para que puedan realizar auditorías y cuentan con áreas para integración, estudio y reserva de expedientes que posteriormente puedan hacer llegar al Tribunal de Justicia Administrativa en caso de que sean faltas graves.
