Acusan a José Candelario de presunto intento de violación a internas
MORELIA, Mich., 24 de julio de 2017.- El pasado 26 de junio, dos mujeres internas en el Centro de Alta Seguridad de Delitos de Alto Impacto Nº 1., de Charo, presuntamente fueron víctimas de golpes, amenazas y violación en grado de tentativa; el principal sospechoso es el mismo coordinador del Sistema Penitenciario de Michoacán, José Candelario Contreras López, según consta en la queja 1866/17 del 18 de julio de 2017, de la Visitaduría Regional de Morelia.
En una copia del documento hecho llegar a varios medios de comunicación, entre ellos Quadratín, se lee a la letra como W. E. M. P y G. V. R. relatan que el general presuntamente ingresó a su celda en compañía de varias custodias y su escoltas a, según, amedrentarlas, porque las mujeres antes habían interpuesto una queja por los malos tratos de su persona, y les exigió que la retiraran, así como 300 mil pesos para dejarlas en paz.
“El día 26 de junio del presente año, aproximadamente a las 13:00 horas nos encontrábamos en la celda número 7 del centro... cuando entraron a nuestra estancia ocho custodios del sexo femenino encapuchadas, pidiendo que nos levantaramos y como yo padezco de trombosis me tarde un poco en levantarme una de ellas medio una cachetada muy fuerte en mi cara…” (sic).
Acto seguido, se percatan de la presencia del general y presuntamente comienzan las demandas por parte del funcionario estatal hacia W. E. M. P., y a hacer comentarios burlones en contra de la misma por su militancia política y los miembros de su partido.
“De manera burlona me dijo que a poco no conocía a Iris Vianey (actual senadora plurinominal del Partido de la Revolución Democrática), que ella era templaria y su hermano. Le dije que no y que no le daría ni un peso...” (sic).
Después de la presunta agresión verbal de parte del general, aseguran vino una sexual, esta vez en contra de G. V. R., a la que, según la relatoría de la queja, se la llevó al baño y la obligó a practicarle sexo oral.
No obstante, señalan que este acto sexual fue interrumpido por la aproximación a la celda del entonces director, José María Zepeda Padilla, mismo que fue avistado unos instantes antes por el personal que estaba con Contreras López y que alertó al coordinador.
El testimonio de W. E. M. P. fue confirmado por su compañera, quien añadió que el ex comandante de la 43/a. Zona Militar con sede en Apatzingán le había ordenado matarla, pero esta se había negado.
Hay que mencionar que no obstante que las personas privadas de la libertad no puedan ser blanco de ataques físicos, psicológicas o de cualesquier otro tipo, sin embargo, en este caso no existe caso de que las mujeres hallan sido llevadas a denunciar ante el Ministerio Público.