A punto de finalizar las tradicionales posadas navideñas

MORELIA, Mich., 23 de diciembre de 2019.- El tiempo de las posadas se está terminando, y lo sabe la señora Clemen, quien organiza una de las posadas más antiguas de la ciudad. Tiene una serie de sentimientos encontrados porque por un lado arrullará al niño Dios, pero por el otro finaliza para ella una de las temporadas más hermosas.

Quizá no acudieron tantas personas como en otras ocasiones, pero quienes lo hicieron le dieron un toque especial a las posadas; “así pasa, a veces somos muchos y a veces poquitos”, dice con resignación la mujer, que encabeza este esfuerzo y lo ha mantenido vivo por muchos años.

“Me da mucho gusto hacerlo, mucho placer, siento como si fuera un niño de verdad y por eso le cantamos con mucho amor”, manifiesta con respecto al arrullo del niño Dios que se realizará el 24 de diciembre y con ello se terminan las posadas.

“Por eso le cantamos y le canto con mucho amor al niño, por todo el tiempo que lo he hecho, año con año sin interrupción”, expone y agradece a las personas que siempre la han acompañado y que siempre la acompañan en esta tradicional celebración, porque ya han pasado muchas generaciones por su casa, algo que le daba emoción, tristeza, alegría, “pero además de todo hay mucho gusto y placer”, reitera.

La señora Clemen manifiesta que no ha pensado a quien decirle si seguirá con esta tradición el día que ella falte; “no sé, de mi casa no creo porque ya todas mis hijas tienen sus ocupaciones y sus trabajos y todo eso, no las veo con ganas de que lo hagan, a menos que ya no estando yo al menos pongan el puro nacimiento aunque, no hagan la posada”, explica, porque dice “todo se va a quedar; yo no me voy a llevar nada”.

Una de las nietas de la señora Clemen, Marita, explica que ahora les toca la posada a ella y a su hermana; “primero rezamos normal y todo eso, y luego salimos a pedir la posada. Nos tenemos que llevar esos muñecos de allá y una vela prendida”, explica en referencia a las figuras de María y José. “Hay personas adentro y personas afuera”, dice y le pregunta a su abuela si estará en esta ocasión adentro contestando la canción de la posada.

El próximo 24 de diciembre, antes de la Nochebuena, se rezará la Novena y el Rosario como todos los días, se arrullará al niño, le cantarán, prenderán luces, tirarán confetis y serpentinas y les pedirán a los visitantes que le den un beso al niño, y les darán un dulce todos. Después pondrán la imagen del niño Dios en el pesebre, le prenderán unas luces y le seguirán cantando; ahí termina la posada, “entonces les damos la cena a todos los que vienen ese día”, concluye Doña Clemen.