Renueva INAH red de museos en Michoacán
MORELIA, Mich., 9 de septiembre de 2011.- Con un presupuesto de 410 millones de pesos, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH-Conaculta) lleva a cabo desde hace cinco años un programa sin precedente de rehabilitación integral y renovación museográfica, para la modernización de su red de museos; la inversión sobrepasa lo destinado a este rubro desde hace por lo menos dos décadas. Hasta la fecha, la renovación de museos ha atendido 86 recintos de los 116 bajo responsabilidad del INAH: los cinco de categoría nacional, además de regionales y de sitio, así como espacios que albergan áreas de investigación, administración y servicios al visitante. En los recintos intervenidos se llevó a cabo la restauración arquitectónica de los inmuebles, en su mayoría de carácter histórico; se diseñó una nueva museografía para la mejor exhibición de los objetos arqueológicos e históricos, y se actualizaron los guiones, a partir de los resultados de las investigaciones más recientes. La mayoría de los museos del INAH carecían de una atención integral desde hace 40 años, de manera que varios de los sistemas eléctricos, instalaciones hidrosanitarias y de telefonía estaban caducos, y en algunos casos, representaban un riesgo para la seguridad tanto de los inmuebles como de las colecciones. Entre los museos atendidos destacan los cinco nacionales: de Antropología, del Virreinato, de las Intervenciones, de las Culturas y de Historia “Castillo de Chapultepec”; además de los regionales de Guadalajara, de Guanajuato “Alhóndiga de Granaditas”, de Michoacán, Potosino, de Guadalupe Zacatecas, de Querétaro, de Guerrero, de Sonora, de Colima, de Tlaxcala y de Aguascalientes. Asimismo, se han intervenido los museos de sitio y locales: Arte Religioso de Santa Mónica (Puebla); San José El Alto (Campeche); Fuerte de San Diego (Guerrero); San Juan de Ulúa (Veracruz), y Artes e Industrias Populares de Pátzcuaro (Michoacán). En el caso del Museo Nacional de Antropología —el más emblemático del país y que es visitado en promedio por dos millones de personas al año—, se realizó la renovación del sistema eléctrico y de seguridad de todo el recinto, se amplió la Sala de Exposiciones Temporales y se le dotó de nuevos equipos de control de temperatura y humedad; además se actualizaron diversos espacios, como el vestíbulo, los auditorios “Jaime Torres Bodet” y “Fray Bernardino de Sahagún” y “Tláloc”, en los que se cambiaron alfombras y butacas, y se instaló un sistema de aire acondicionado. Asimismo, se remodeló la tienda del museo y el área de Servicios Educativos, así como las áreas de bodegas, en las que se instaló nuevo mobiliario profesional y adecuado para los acervos arqueológicos y etnográficos que se resguardan, que en conjunto suman 200 mil objetos. Además se dio mantenimiento a la cubierta de bronce de la fuente conocida como “El Paraguas”. Otra de las obras que ha implicado mayores esfuerzos en inversión y trabajo de restauración, ha sido la modernización del Museo Nacional de las Culturas, recinto de gran significado en la historia de la cultura de México, por tratarse del recinto que albergó al primer Museo Nacional del país, fundado en 1825. El reto en este museo fue habilitar el inmueble de importancia histórica como un museo del siglo XXI, lo que implicó casi cuatro años de trabajos de restauración y adecuaciones arquitectónicas, renovación museográfica, actualización de todos los sistemas hidrosanitarios, eléctricos, de iluminación, de telefonía y de seguridad que, después de cuatro décadas necesitaban sustituirse. Asimismo, el inmueble histórico fue dotado, por primera vez, de un sistema de control de temperatura para la protección de colecciones y de tecnología de primera generación y equipo digital de comunicación. Durante este proceso de actualización, la Secretaría de Hacienda reintegró más de 2,000 m² de espacio arquitectónico que habían sido separados —hace varias décadas— del conjunto original de la Casa de Moneda, lo que permitió que el recinto museístico ganara áreas para exhibición. Museos de la Independencia y la RevoluciónDurante 2010, con motivo de los festejos del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución mexicanas, el programa de renovación de museos del INAH priorizó la atención de aquéllos vinculados con las gestas históricas. Algunos de los museos rehabilitados que se ubican dentro de la ruta de la Independencia, destacan por haber sido los hogares de los héroes patrios: Casa de Morelos (en Morelia, Michoacán); Casa de Allende (en San Miguel de Allende, Guanajuato); Casa de Hidalgo (en Dolores Hidalgo, Guanajuato); “La Casa de Hidalgo “La Francia Chiquita” (en San Felipe Torres Mochas, Guanajuato); Centro Comunitario Ecatepec “Casa de Morelos” (en Ecatepec, Edomex). La propuesta curatorial para rehabilitar los recintos, que fueron las casas familiares de los próceres, es ofrecer al público lecturas más libres de los personajes históricos, donde se pueden apreciar como humanos más que como mitos, en un tono que entrelaza la biografía con los acontecimientos, al tiempo que se ubica al visitante en el pasado a través de ambientaciones de época y se narra la historia del propio inmueble. Otro trabajo relevante fue la rehabilitación de la Ex Aduana de Ciudad Juárez, Chihuahua, donde se albergó el primer museo del INAH dedicado a la Revolución Mexicana. Tras un intenso trabajo de rehabilitación arquitectónica y renovación museográfica, que resalta el papel de la frontera como un espacio estratégico que favoreció al movimiento revolucionario; el antiguo Museo Histórico de Ciudad Juárez fue reabierto al público como el Museo de la Revolución en la Frontera (Muref). Un recinto de vanguardia con elementos que brindan al público un recorrido lúdico, dinámico y educativo.
