Con más de 370 presentaciones, Cronopio recorre Michoacán
03 de mayo de 2017
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20:34
Luis Felipe Reynoso/Quadratín
MORELIA, Mich., 03 de mayo de. 2017.- 'Cronopio, Colectivo de Arte Escénico', ha viajado a lo largo del estado por cuatro años, a través del vehículo Rucio dos, propiedad del Centro Dramático de Michoacán (Cedram) presentándose en distintas comunidades con su obra 'Maraca y Pandereta, una historia en Do mayor'. Han realizado más de 370 presentaciones.
El grupo teatral itinerante está conformado por Liliana Fraga Izaguirre, directora del grupo e intérprete de uno de los personajes de la obra; José Ramón García Pérez, encargado de comunicación e intérprete del otro personaje que aparece en escena; Elizabeth Navarro, encargada de Gestión y Programación; y Manuel Waldemar Aguilar Butanda, jefe de foro y presentador.
José Ramón García explica que 'Maraca y Pandereta' es una obra con una fórmula sencilla, una pareja que siempre está en una interacción y las situaciones que se generan, a veces se pelean o se extrañan, "es una obra sencilla, por eso tiene tanto éxito" señala y dice que al final de la función hay una retroalimentación con el público de entre 10 y 15 minutos.
"En este tiempo en que nuestros cuerpos han sido sometidos de muchas formas, justo la danza y teatro clown son una forma de expresión con el cuerpo en un lenguaje universal, lo que nos permitimos con esta obra es ir a hablar con el cuerpo, y la emoción con que los niños se acercan a ver esta obra nos dice que el cuerpo está habitado, entonces queremos eso, cuerpos habitados en zonas habitables", platica Elizabeth Navarro.
Aunque la obra está hecha en esencia para el público infantil, el grupo se percató que estaban teniendo mayor impacto con otros públicos, el de los jóvenes y los adultos, ya que mientras los niños disfrutaba la parte lúdica, con la figura de los payasos, los adultos se mostraban tocados emocionalmente. Eso ha dado pie, dicen, a poder llegan a cárceles y asilos, "al principio son renuentes, pero terminan siendo muy participativos, terminan muy agradecidos", indica la directora.
También cuenta que en un principio querían mostrar a través del clown, el ballet clásico, pero eso quedó atrás de inmediato, "casi desde la segunda función", ríe divertida. Dice que en muchas comunidades se dan cuenta que no es una obra convencional porque trabajan desde lo clown, "porque la gente espera otra cosa, no sabían qué era el clown, un payaso especial, un payaso escénico".
Elizabeth Navarro expuso que el Cedram trabaja un lenguaje dialéctico, algo que ellos también trabajan con constancia en 'Maraca y Pandereta'. Sin embargo si no dan introducción y cierre, en muchas comunidades no saben cómo abordar la obra, entre más lejos son las comunidades más tienen que explicar, asegura.
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