Toritos de canuto, tradición de más de 300 años que no debe morir
TARÍMBARO, Mich., 19 de octubre de 2023.- Ahí en la plaza principal de la cabecera municipal de Tarímbaro, Manuel Lara, cronista de esa ciudad, ha dispuesto una mesa con pequeñas figuras de toritos de petate pero hechas de canutillo y hoja de maíz. Parecen artesanías pero asegura que no se venden, solamente es una manera para que los niños conozcan a profundidad la tradición.
Los toritos nacieron en la zona lacustre, y se usaron como una enseñanza de la religión, suelta casi de inmediato, para explicar que aunque nacieron en esa región, en Tarimbaro, desde hace cuatro siglos y medio se apropiaron de esto, y hoy en día son parte fundamental de su fiesta más importante que es el carnaval.
Aunque son elementos de evangelización, explica, a los niños hace 300 años no se les dejaba entrar a donde elaboraban estos majestuosos toros, así que buscaron la forma de expresar su propio arte, porque Tarímbaro es una comunidad de artesanos, asegura.
En esa búsqueda de un elemento que les diera la oportunidad de expresarse, encontraron en la planta del maíz seco, el canuto, un material apropiado para elaborar pequeños toritos de petate que andan en una fina línea entre la artesanía y el juguete, a medio camino, indica, y asegura que se les llaman toritos de canuto.
Con el tiempo ya se ha perdido la fecha exacta en la cual nacieron estos singulares toritos miniatura, explica, sin embargo hay datos que pueden generar una aproximación, ya que en 1810 ya los hacían.
Cuenta que a partir de 1980, a través de la Casa de Artesanías, comenzaron un programa de rescate de este torito, porque ya se estaba perdiendo. Fue a través de concursos y talleres y ahora es una expresión únicamente de Tarímbaro.
Estas artesanías juguete no pesan nada porque están hechas de este canuto que es muy ligero, expresa Manuel Lara, "muchos piensan que es madera cuando los ven, pero no", dice mientras sostiene uno en sus manos el cual está ya adornado y pintado, señala que ese que sostiene tiene un costo, solo en materiales, de 12 mil pesos.
Hoy en día se siguen haciendo estos toritos para que los niños conozcan y conserven la tradición, tanto es así que han llevado estos talleres a ciudades de Estados Unidos, sobre todo a San Pablo Minnesota, lugar donde hay una comunidad muy grande originaria de Tarímbaro, "básicamente hay otro Tarímbaro ahí", asegura.