Acusan a la Cocotra de fomentar el pirataje en Villamar
VILLAMAR, Mich., 6 de julio de 2020.- La prestación de servicio por particulares en la ruta San Antonio-Jiquilpan- Sahuayo ha generado una serie de protestas no solo por parte de los taxistas regulares y sus respectivas organizaciones, sino por los propios usuarios, quienes acusan a Cocotra de ser parte de esta situación al permitir que “se afecten a familias y fomentar el pirataje”.
Tras elevar la protesta respectiva y anunciar que esta situación podría desencadenar en un conflicto mayor, Gilberto Grimaldo, representante de los taxistas de la ruta mencionada explicó: “el problema que estamos enfrentando es con los particulares que hacen servicio de transporte. Varios vehículos hacen servicio público y no traen placas para ello, son particulares; solamente hoy detectamos tres, pero son más; uno de estos es el vehículo de la ex jefa de tenencia que no sé por qué la dejan trabajar; trae una camioneta con placas particulares, ¿cómo es posible que ande haciendo servicio?”.
Informó que los concesionarios establecieron un diálogo con los propietarios de los vehículos particulares, a fin de solicitarles que desistan de esta actividad que afecta seriamente a su economía; la situación ha orillado incluso a que se reduzca el número de unidades concesionadas que prestan servicio en la ruta, producto de la falta de rentabilidad. “Venimos a ver a las autoridades para que tomen cartas en el asunto porque nos están dando en la torre, pagamos seguro de las camionetas, verificaciones, placas, impuestos. Ellos no pagan nada”.
Gilberto Grimaldo señala que el pasaje regular de la tenencia de San Antonio en Villamar a Sahuayo es de 35 pesos por persona, mismo cobro que realizan los particulares que prestan este servicio. “Tenemos seis camionetas y están trabajando tres nada más porque nos dan duro los particulares, ellos trabajan cuando quieren donde quieren y a la hora que quieren y se van a donde quiera; nosotros tenemos un horario de 6 a 17 horas y tenemos que hacer el servicio o la gente se nos molesta”.
Luego de exponer el caso ante la autoridad municipal en Villamar y Jiquilpan, los concesionarios pusieron el tema en manos de la Dirección de Vialidad de Jiquilpan, a la que entregaron la descripción y los números de matrícula de los vehículos de estos particulares.
Gilberto Grimaldo señaló que se había dado ya parte sobre este asunto a la Comisión Coordinadora de Transporte de la entidad; extrañamente, agregó, cuando Cocotra realiza las revisiones en esta región es a los transportistas concesionados a quien revisa. Aseguró que esto se debe a que existe complicidad entre los particulares dedicados a esta actividad y personal de la dependencia encargada de regular la actividad transportista de la entidad.
“Tienen conectes. Cuando viene Cocotra no aparecen; de que hay corrupción y componendas las hay, toda la vida ha sido lo mismo con Cocotra, es una corrupción bárbara, llegan, les dan su mochada y se van”.