Leucemia linfocítica, padecimiento que se ha incrementado en México
MORELIA, Mich., 20 de abril de 2021.- Aunque la leucemia linfocítica crónica no tiene una gran incidencia en México, es una enfermedad que con el paso del tiempo se ha ido incrementando, señaló en rueda de prensa el médico hematólogo Óscar Pérez, quien dijo qué tiene una incidencia alta en países europeos y es, por definición una enfermedad incurable.
Es una enfermedad que predominantemente se va a presentar en personas que están arriba de la séptima década de la vida, señaló el médico, quien expuso que domina más esta leucemia en países de Europa, de origen anglosajón, y que es menos frecuente en México, ya que en países de Latinoamérica, incluido México, la leucemia no es ni la décima parte de todos los cánceres que se tratan.
Según reportes del 2011, hechos por la Secretaría de Salud de México, hay un perfil epidemiológico de los tumores malignos en México, la leucemia linfocítica crónica, con el paso del tiempo ha ido incrementando, y ha habido una tendencia de aumento en los casos de un 30 por ciento, dijo.
Reiteró que la frecuencia en el país no es grande, ya que según algunas publicaciones, en un periodo que va de 1985 a 1994, se ha dado 43 casos, es decir, alrededor de 4 casos en 10 años. Se habla, dijo, que la incidencia calculada de acuerdo a las publicaciones para el 2010, es de la décima parte de lo que se está informando en literatura mundial en los países europeos, donde hay una ascendencia anglosajona.
Es una enfermedad que tiene una supervivencia alta, dijo el médico, siempre y cuando tenga un tratamiento adecuado, o se mantenga en vigilancia a aquellos que no requieren de tratamiento en ese momento. Hay mucha diferencia con las leucemias agudas, las cuales tienen una evolución un tanto más catastrófica, dijo.
La mediana a nivel mundial de esta enfermedad, dijo el galeno, es de 65 años, el problema que se tiene a esta edad, es que casi 9 de cada 10 van a tener algún otra enfermedad asociada, serán diabéticos, hipertensos, tendrán problemas de corazón o problemas de grasa, y casi la mitad de las personas con linfocítica crónica, por el grupo de edad, va a tener comorbilidades graves, esto es importante porque se está hablando de una población que puede ser vulnerable.
Por su parte, la doctora Margarita Rodríguez, médico internista y hematóloga, explicó que ha habido una evolución en el tratamiento, porque se ha dado una revolución en los últimos años. La terapia sigo tratamiento que se conocen de forma general dijo, son medicamentos que están enfocados a combatir el cáncer.
En los últimos cinco años, ha habido una verdadera revolución en cuanto al tratamiento por la aparición de nuevos agentes. Sin embargo, la evolución del tratamiento de esta enfermedad no se ha quedado aquí; "la combinación de estos agentes innovadores, probablemente es lo que está dándonos la evolución, la revolución y probablemente la mejoría, sin pensar todavía en al alcance de una curación como tal", expuso.
En 2021 se llegó a otra era, señaló la especialista, y la tendencia es utilizar cada vez menos quimioterapia como se conoce, "sin embargo, un tratamiento libre de quimioterapia no significa que sea libre de efectos adversos, y esos se conocen y desde luego se sabe como tratarlos".
Estos agentes innovadores son muy particulares, dijo, porque ahora se utiliza la tecnología con la que se dispone. La tecnología molecular, las bases moleculares, el conocimiento de la biología de los padecimientos, ha favorecido que aparezcan medicamentos que están diseñados para atacar específicamente algún proceso de la evolución de esta enfermedad, detenerla, impedirla o bien hacer que la muerte de esta célula sea más rápida, que la muerte programada esperada.
El laboratorio AstraZeneca, desde hace años, están trabajando la parte de la oncología y está generando una revolución para redefinir el manejo del cáncer; tiene la ambición de brindar un tratamiento para el cáncer en cualquiera de sus formas, y a través de la innovación ha realizado el programa de desarrollo más intenso en la industria farmacéutica, y con ello tiene una nueva esperanza para pacientes con leucemia linfocítica crónica.