Proponen hasta 5 años de cárcel por terapias de reconversión sexual
MORELIA, Mich., 9 de septiembre de 2020.- Los ECOSIG o terapias de reconversión sexual quedarían prohibidas y tipificadas en el Código Penal y serían sancionadas con prisión de dos a cinco años y la inhabilitación de su ejercicio profesional por el mismo tiempo a quien cometa este delito a propuesta de la diputada Zenaida Salvador.
En la sesión extraordinaria virtual del pleno de la 74 Legislatura del Congreso del Estado, la legisladora planteó la adición de un artículo 157 bis para sancionar a toda aquella persona física o moral que, con o sin fines de lucro, promueva, aplique, emplee, imparta, utilice, obligue o financie cualquier tipo de método, terapia, consejería, servicio, tratamiento o practica no quirúrgica dirigidas a cualquier persona con la finalidad de reorientar, restringir, menoscabar o suprimir la orientación sexual o identidad de género de su persona, a través de recibir una terapia de conversión.
Se entiende por terapia de conversión, todas aquellas prácticas como sesiones psicológicas, psiquiátricas, tratamientos o métodos de cualquier índole que tengan por objeto obstaculizar la expresión o identidad de género, en las que se emplee la violencia, física, psicológica, sexual, moral, psicoemocional, tratos inhumanos, crueles y degradantes que violenten la dignidad y los derechos humanos.
Si la terapia de conversión se practicara en un menor de dieciocho años de edad o persona que no tenga capacidad para comprender el significado del hecho o la capacidad de resistir la conducta, la pena se aumentará en una mitad y se perseguirá de oficio, mientras en los adultos el delito será perseguido por querella.
En su exposición de motivos explicó que los ECOSIG es el término que se utiliza para definir los esfuerzos para corregir la orientación sexual e identidad de género y no son terapias de conversión, por lo que el término correcto para nombrarlas es: Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual e Identidad de Género (ECOSIG).
Los ECOSIG carecen de sustento científico; están basados en la fe, tanto religiosa como en la creencia de que las personas pueden cambiar con estos métodos basados en la coerción y la falta de consentimiento de las personas ya que muchas de estas son forzadas a ingresar bajo presión psicológica o chantaje emocional de la familia, principalmente.