Informar sobre usos de la marihuana, objetivo de convivencia cannábica
MORELIA, Mich., 26 de noviembre de 2020.- Son las 16:20 horas en la plaza de Armas y el humo de pipas y cigarrillos se eleva sobre las decenas de personas reunidas, es la convivencia cannábica.
Bromas aparte, el objetivo de esta convivencia excede el mero consumo de la marihuana, ya que se pretende dar información a la población sobre los diferentes usos de la planta y, especialmente, sobre los términos y cómo afecta a los usuarios de la despenalización y regulación que recientemente aprobaran legisladores federales.
“Se podría pensar que nos dieron permiso de fumar marihuana y que ahora todo está bien, pero hay aspectos con los que no estamos de acuerdo, porque impactan los derechos de los usuarios de marihuana”, explica Édgar Ramsés Pahua Quezada, integrante del Movimiento Cannábico.
Y es que las normas recientes prevén el uso de la marihuana con limitaciones, mismas que no se aplican a otros productos, como el alcohol y el tabaco.
“Nápente dice cuántas cervezas puedes comprar en una semana, nadie te dice cuánto alcohol puedes beber en un mes, pero a los usuarios de la marihuana se nos aplican limites de la planta que podemos portar, que podemos comprar”, expone.
Pahua Quezada refiere que con las nuevas leyes incluso debe pueden correr más riesgos, sobre todo, de extorsión y persecución a los usuarios de la marihuana, porque “algunos fuman en un año mucho menos del límite establecido, pero otros fuman esas cantidades en uno o dos días, qué va a pasar, can a llenar las cárceles con peligrosos delincuentes que fuman mucha marihuana”.
Derecho a la libre expresión, al libre desarrollo de la personalidad, de tránsito y uso de espacios públicos son algunos de los que, considera Édgar Ramsés Pahua, se ven vulnerados con la nueva legislación sobre la marihuana.
Por ello, indica, se requiere de la asignación de espacios públicos para el consumo, la eliminación de los límites en cantidades a portar y consumir, la garantía de no extorsiones por elementos de seguridad pública en contra de usuarios, la posibilidad de sembrar y consumir en libertad y campañas de información y sensibilización sobre las implicaciones del uso de esta planta.
Menciona que está en marcha una acción de inconstitucionalidad para solventar esos “errores” en las leyes y así dotar a los consumidores de marihuana de reales garantías de un acceso y empleo seguro de la cannabis sativa.
Son las 16:20 horas y metros antes del kiosko que está al centro de la plaza de Armas ya se deja sentir el característico olor de la marihuana, mientras algunos jóvenes y no tan jóvenes piden un encendedor para sus pipas o cigarrillos, que les son acercados de inmediato.