Histórico, día del eclipse; reunió a miles de morelianos para observarlo
MORELIA, Mich., 8 de abril de 2024.- Desde temprano parecía un día distinto, como que poco a poco las personas fueron entendiendo que era un día histórico para el país, porque no es frecuente que sucedan los eclipses de sol.
En algunos lugares la ciudad estaba vacía, era como un día sin actividades, aunque de manera oficial el Gobierno de Michoacán no suspendió clases, pero sí lo hicieron algunos centros educativos, tomando en cuenta la magnitud de este suceso histórico. Eso permitió que muchas familias se reunieran en lugares que fueron anunciados como neurálgicos, para poder ver de una manera segura el espectáculo astronómico.
A los jardines del Centro de Convenciones y Exposiciones de Morelia (Ceconexpo), uno de los lugares señalados, la gente acudió por decenas. Ahí, a los alrededores del Planetario de Morelia, se hicieron actividades para poder observar el eclipse sin poner en riesgo la vista.
Sin embargo como el lugar está lleno de árboles, la luz filtrada a través de sus ramas permitió mirar este espectáculo, y mucha gente, en lugar de mirar al cielo, miró al suelo, a las miles de diminutas medialunas que se proyectaron sobre el piso.
"Estuvo excelente, se vio muy padre la verdad", manifestó Paloma a Quadratín, quien indicó que en la escuela donde van sus dos hijas, cancelaron las clases, lo que les permitió ir a los jardines de este pulmón moreliano.
Lo mismo para la familia de la señora María, quien aseguró que estuvo divertido para todos ellos, y los niños tuvieron una buena experiencia, histórica, "fue algo familiar aquí con los pequeños para que también disfruten esta experiencia que no se da muy seguido, y ellos muy contentos", expresó.
En su caso, la escuela donde van sus hijos también suspendió actividades porque se trata de un evento histórico, externó. Su hijo, Yair, dijo que vio el eclipse unos seis segundos y al principio tuvo un poco de miedo, pero le gustó mucho.
Para el niño Luis Fernando, la experiencia también fue muy divertida, "la experiencia estuvo padre, fue un rato para pasar en familia y para perder tiempo porque ya se acaban las vacaciones, pero estuvo padre, la verdad, y por qué no se va a repetir hasta dentro de unos treinta y tantos años, ya vamos a ser señores", expresó.
Para Brenda, tía de los niños, la experiencia fue muy buena, "se me hizo que fue muy organizado y además estuvieron otorgando lentes, me gustó mucho la experiencia del telescopio, también estuvo muy bonita y los niños, creo que se divirtieron mucho". iktán, un niño que no rebasa los dos años, quien está con Brenda, cuenta a Quadratín que vio una luna naranja.
"Los niños no tuvieron clases por eso aprovechamos para venirlo a ver en familia", expresó Eliza, otra señora que disfrutó en familia de los jardines del Ceconexpo. Contó que ya tenía planeado ir a ver el eclipse aunque sus hijos tuvieran clases, "si tenían clases no los iba a llevar de todos modos, porque clases hay todos los años pero eclipses no".
La señora Olga manifestó que se dicen muchas cosas en torno a los eclipses, muchas solo son ideas. Recordó también el eclipse que ocurrió en 1991 donde todo se oscureció, y ahora la luz pegó como si fuera el atardecer, "eso es algo que no cualquiera lo vivimos".
Los niños Elena, Axel y Ángel vivieron la experiencia de manera divertida, en familia, y descubriendo algo que nunca habían visto. Cuentan que les dio emoción ver así la luna y el sol, aunque también destacaron la realidad virtual que vivieron con equipos organizados por la UNAM campus Morelia.