Hay que caminarle mucho para vender: heladeros en tiempo de calor
![](https://www.quadratin.com.mx/www/wp-content/uploads/2024/03/Hay-que-caminarle-mucho-para-vender-heladeros-en-tiempo-de-calor-3-1160x700.jpg)
MORELIA, Mich., 10 de marzo de 2024.- Ya tiene varios días que el calor es sofocante, lo que ocasiona que se vendan con más frecuencia ciertos productos. O eso parece, ya que de acuerdo al señor Graciano, un hombre de 62 años se dedica a vender helados y que antes se dedicó a la albañilería, las ventas están bajas pese al calor.
"Se vende muy poco", señala el hombre que vende helados de la marca Bon Ice. Cuenta a Quadratín que tiene unos meses trabajando en la venta de helados, porque antes se dedicó a la albañilería, pero tuvo que dejarlo porque se enfermó de vértigo.
"Me pegó un hipo durante unas tres semanas, y esa pinche enfermedad, al grado de que me caía de la cama, entonces ya cuando me empecé a recuperar un poco fui al trabajo porque ya se me había acabado lo poquito que había ahorrado, y entonces me decían: 'no, vienes borracho, mira', y les decía: 'no, es el mareo que me pegó, yo no tomo', 'no, eres borracho, vete a tu casa, échate un sueño y vienes, yo te doy para que te la cures", narró.
![](https://www.quadratin.com.mx/www/wp-content/uploads/2024/03/Hay-que-caminarle-mucho-para-vender-heladeros-en-tiempo-de-calor-2-1024x570.jpg)
Entonces se cansó de pedir trabajo, pero nadie le daba, y así fue que llegó a la venta de los helados, porque necesitaba comer. Hoy va al día, dice, por lo menos saca para comer.
Cuenta que no tiene hijos, se dejó con la que era su esposa hace muchos años y vive solo, y después de la enfermedad se puso más fea la cosa, ha ido a revisión médica, primero tomaba medicina tradicional porque también padece diabetes, y hace poco decidió empezar a ir con unos médicos naturistas, y eso ha hecho que se sienta un poco mejor.
El hombre que vende en la zona de la plaza de Capuchinas, dice que camina hacia la Lázaro Cárdenas y ahí se empieza a mover por la avenida en dirección a Ventura Puente, busca en las escuelas, "así me la llevo poquito, que venda en las plazas poquito, que venda… así", expone Graciano.
Para Rigoberto, un hombre de 40 años, la cosa pinta diferente, mejor, al menos en la cuestión de las ventas porque él tiene otro problema; señala que el Ayuntamiento de Morelia no lo deja trabajar, "luego nos quiere quitar la mercancía y todo eso", expone, sin embargo, sí puede vender en las periferias, ahí no lo molestan.
![](https://www.quadratin.com.mx/www/wp-content/uploads/2024/03/Hay-que-caminarle-mucho-para-vender-heladeros-en-tiempo-de-calor-1-1024x579.jpg)
Él por lo regular trabaja de albañil, y solamente el fin de semana se pone a vender helados a través de un carrito donde lleva una gran variedad, porque no solamente son helados en muchas variedades, sino también paletas de hielo, "aquí me ando sacando unos 500, 600 pesos por día, pero hay que caminarle mucho para vender", indica.
Su jornada inicia alrededor del medio día y se va a las 6 de la tarde, va buscando lugares donde pueda vender, es la ventaja de llevar un carrito. En su recorrido llega hasta el bosque Cuauhtémoc, y a veces tampoco lo dejan vender ahí.
Una vez que termina la jornada, regresa a la paletería de donde saca los productos, hace cuentas y termina su día laboral.