Ha atendido Centro de Escucha a 16 víctimas de violencia: Arzobispo
MORELIA, Mich., 3 de diciembre de 2017.- A un mes de haberse inaugurado el primer Centro de Escucha en la Arquidiócesis de Morelia se han atendido a 16 víctimas de secuestro, agresión sexual y violación, informó el arzobispo Carlos Garfias Merlos, quien inauguró en segundo centro en la Capilla de Santiaguito.
En rueda de prensa previa a la bendición y corte del listón del nuevo Centro, dijo que se ha detectado que la violencia más frecuente en la capital michoacana es la intrafamiliar, entre padres e hijos, entre esposos, la agresión entre unos y otros.
Hay también personas que se han acercado al primer centro, ubicado en la calle de Benito Juárez 156, en el Centro Histórico de Morelia, a solicitar información y se está capacitando al personal para atender los centros que se abran en lo sucesivo, profesionistas que si bien serán voluntarios, será retribuidos de una manera justa, principalmente psicólogos, trabajadores sociales y abogados.
A la fecha se han impartido tres talleres, uno a 42 personas sobre atención a víctimas, el segundo a 67 personas de inducción a la reconciliación y el tercero a otras 24 personas sobre introducción a los derechos humanos.
Los recursos para financiar esos centros provienen de tres fundamentales: Catholic Relief Services de Estados Unidos, Ayuda para la Iglesia Necesitada de Alemania y Mundo Unido de Italia y se estimada que uno de los centros tenga un gasto anual de 800 mil pesos.
Luego de la rueda de prensa que en esta ocasión se llevó a cabo en la Capilla de Santiaguito, la cual tiene un anexo que cuenta con oficinas, donde operará el segundo centro a partir de este domingo, aunque desde hace tiempo ofrece servicio médico en promedio a 40 personal mensualmente, indicó el sacerdote José Guzmán, de la segunda vicaría de la arquidiócesis.
Indicó que se eligió esa capilla principalmente por su ubicación a unos metros del periférico, sobre la calle Morelos Norte, ya que la vicaría abarca desde la tenencia de Capula de Morelia, hasta los municipios de Tarímbaro y Álvaro Obregón, además de que no se ofrecen servicios a excepción de catequesis.
Los centros de escucha, reiteró el arzobispo Garfias Merlos operarán al menos uno en cada una de las siete zonas de la arquidiócesis y en Morelia, en los polígonos con mayor incidencia delictiva.
Esos centros de escucha son la respuesta de la Iglesia Católica para la atención de los víctimas de la violencia ya sean personas, familias, grupos o comunidades a quienes se les da un acompañamiento integral psicosocial, espiritual, pastoral y jurídico, como medios para alcanzar la sanación interior y la paz.
