Gobernadores arremeten contra NSJP para tapar su irresponsabilidad
El sistema penal acusatorio y adversarial puede funcionar si está bien armado, si se tienen las piezas correctas y si se financia porque, en primer lugar, México tiene un déficit de al menos un 400 por ciento de jueces y necesita cuadruplicar el número de juzgadores.
En segundo lugar, se requieren también policías mejor capacitados y más elementos, porque una vez que atrapan a un presunto delincuente tienen que dedicarle tiempo para llenar los expedientes del delito y probablemente también asistir a las audiencias públicas.
En tercer lugar, si el sistema de justicia penal despresuriza las cárceles, no es malo porque las cárceles son universidades del delito, indicó en entrevista con Quadratín, durante el segundo foro internacional por la seguridad de Michoacán.
“Si están preocupados los gobernadores, entonces que inviertan en penales estatales para albergar a los reos estatales y federales, si se quejan de la sobrepoblación que existe y no quieren sacarlos, pero viven hacinados y en muy malas condiciones, además de que hay un déficit también de policías penitenciarios”.
Ante la alarma social que ha generado el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, al declarar que van a ser liberados 4 mil delincuentes, consideró que probablemente sí hay que revisar el catálogo de delitos que ahora no se consideran graves, como el uso de armas de fuego.
“En este país, sí es cierto, en seis de cada diez delitos que se cometen con violencia, hay una arma de fuego detrás, y también 55 por ciento de los delitos que se cometen son con un arma de fuego, entonces sí hay que endurecer las penas por circulación, portación y uso de arma de fuego”.
Para el especialista en seguridad, la irresponsabilidad de la impunidad que se vive, y está asentado en el índice global de impunidad, es compartida por el aparato de seguridad que depende del Ejecutivo y la parte de justicia que depende de los sistemas judiciales estatales, los dos están colapsados y generan una impunidad rampante.
“Es hora que los poderes judiciales en los estados se abran al escrutinio público sobre su trabajo, hemos recargado la fuerza de la crítica sobre los policías, hay muchas responsabilidad de los jueces, faltan jueces, más juzgados, falta llevar la justicia a muchos rincones del país a donde no llega, y donde no llega se crean autodefensas”.