Café, el aporte de Saúl para hacer más llevadera la espera de la vacuna
MORELIA, Mich., 8 de septiembre de 2021.- Son pasadas las seis de la mañana y hace frío. Las últimas semanas los huracanes han hecho que llueva constantemente en la capital michoacana. La fila ya es larga para entonces; decenas de treintañeros que desean aplicarse el biológico en Ciudad Universitaria (CU), esperan que den las ocho y media de la mañana para que inicie el proceso, mientras aguardan expectantes.
Ante esa situación, y muchas veces bajo la lluvia, se agradece un café caliente, y eso lo pensó desde un principio, Saúl, un joven que hace unos 12 años inició su negocio de impresión de planos y copias, aprovechando que su local y su casa se encuentran frente a la Facultad de Arquitectura de la Universidad Michoacana.
Dos jóvenes se paran frente a un domicilio en la calle Dinamarca, y miran un tanto tímidos. Les parece poco increíble que alguien esté regalando café, cuando difícilmente la gente regala incluso sonrisas. Ahí parados, observan el letrero en letras azules de "CAFÉ GRATIS".
Saúl solo les dice: "adelante, sírvanse", y venciendo cualquier timidez, los jóvenes toman los vasos y se sirven café, Ulises regresa a sus actividades.
"Así fue desde los de sesenta", dice a Quadratín. Cuenta que algo le movió ver a la gente de la tercera edad ahí esperando, haciendo fila, muchos de ellos sin llevarse nada la boca, "y aunque sea un café, creo que les cae muy bien", asevera.
"Una vez un señor se murió ahí en aquella esquina, mira, donde está ese poste", dice señalando en dirección a CU; "hacía fila, aún no se había vacunado, porque luego muchos dijeron que fue por la vacuna, pero no", cuenta Saúl. De esa vez recuerda también que los servicios periciales llegaron más de dos horas después, y mientras las otras personas de la tercera edad miraban asombrados y con miedo, seguía la fila sin parar; "imagínate para los otros viejitos", dice lamentando el hecho.
Se interrumpe la plática porque llega unas personas para sacar la información de registro de vacuna, otra más toma café.
"¿Yo por qué lo hago? porque tal vez la gente se vacune y algún día regrese a CU", expone Saúl, quien dice que a los negocios que están cerca de CU se los está llevando "el carajo", algún día la gente regresará a las escuelas y todos los negocios que están alrededor podrán estar mejor.
"No lo hago con afán de lucro ni por hacerme publicidad, lo hago como una respuesta a lo que CU me ha dado, yo aquí tengo 12 años trabajando, imprimiendo planos y CU me ha dado todo; me dio una familia, me dio un hogar, me dio una fuente de trabajo, y desgraciadamente los últimos 20 meses estamos sacando la lengua, y no soy el único", expone el joven que lleva una playera del equipo de Los Pumas de la UNAM, y que asegura que la gente llega ya desde las seis de la mañana por su café, quizá porque vio las publicaciones en Facebook.
Ahí, en ese lugar de la calle Dinamarca, muy cerca de la avenida Universidad, en una cochera llena de plantas y letreros, también se anuncia que hay servicio de baño. Saúl explica que también podría ser gratuitos, pero eso se lo deja a los usuarios, con la cooperación que puedan dejar para poder seguir manteniendo ese servicio.