Con mezcla, pintura y una caguama se festeja el Día del Albañil
MORELIA, Mich., 3 de mayo de 2022.- Este martes es el Día del Albañil, los responsables de darle forma a los sueños y que con mucho esfuerzo logran hacer realidad la construcción de una vivienda, mezclando sus saberes de todas las artes del alarife.
Dominan la técnica del aplanado y colado, y también se dan un tiempo para tomarse una refrescante caguama, ¡esa que tanto indignaba a Ricardo Anaya!
Eduardo es albañil y trabaja desde hace seis meses en una obra detrás del mercado de abasto; inicia desde muy temprano hasta que el cuerpo aguanta, ¡la necesidad apremia, tiene que mantener a cinco hijos!, comentó frente a las cámaras de Quadratín.
El oficio de albañil lo aprendió desde muy joven. Un hermano mayor lo enseñó a él y a otros dos, ahora domina casi todas las técnicas y además ha aprendido otros oficios, como la plomería y la electricidad.
“Hago acabados, lo que sigue después del aplanado; pero le sé a todas las demás técnicas: albañilería, mezcla, pintura y pegar tabique”, declaró.
Sin embargo, los ingresos que obtiene de sol a sol, son suficientes.
“Echándole ganas sí conviene, si se le pone empeño sí alcanza el dinero, hay que trabajar desde temprano, ¡y sí alcanza para la caguama”, expresó entre risas.
Sin dejar un segundo las aplanadoras y con ritmo constante, nos cuenta que tiene cinco hijos, todos pequeños, así que debe trabajar con esmero para poder mantenerlos, así como lo ha hecho desde que su patrón lo contrató para hacer una casa con locales comerciales, y de quien espera, se rife con las carnitas y las caguamas.
Javier, contratista de la obra, no solo se comprometió a traerles las carnitas acostumbradas, sino que reconoció en su personal el talento y el trabajo.
“Eso de que se echan sus caguamas, es pura mala fama, ¡nada más!, porque sin su ayuda, no tendríamos nuestras casas, porque le ponen todas las ganas, y a pesar de que es muy pesado. El trabajo de un albañil tradicional es mejor, porque tienen un gran ingenio para resolver. Mientras que los arquitectos solo mandan, pero toda friega son los maestros albañiles y sus chalanes”, explicó.
Para este martes les ha preparado sus carnitas, pero nada de caguamas, porque agarran carrera “y mañana no vienen a trabajar”, dice, mientras le gana la risa.