Bosques, espacio para reflexionar y visibilizar el deterioro ambiental

MORELIA, Mich., 5 de junio de 2019.- Aún con la ligera lluvia que amenazaba en convertirse en tormenta, los ánimos no mermaron en la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, fecha que obliga a poner un alto al deterioro que la raza humana está ocasionando al planeta.

En esta ocasión, la comunidad de San Rafael Cutzaróndiro, en el municipio de Tacámbaro, fue elegida como sede para convocar a todos los sectores y alzar la voz en solidaridad con la naturaleza; la razón fue que sus habitantes lograron ponerse de acuerdo para proteger mil 100 hectáreas de suelo y restaurar su vocación forestal. A la fecha, suman 35 mil hectáreas en reserva para evitar la sustitución de pinos por aguacates.

Y es que, a estas alturas, ya casa vez son menos las reservas que lucen un arbolado adulto abundante, repleto de vida, y con las condiciones de brindar servicios ambientales; por lo que el llamado fue a valorar y tenerle cariño a nuestros bosques.

“Qué sean nuestros niños y jóvenes quienes griten alto y fuerte: ¡ya basta! Cuidemos nuestro planeta, cuidemos nuestro hogar!”, expresó el gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles, quien advirtió que de no hacerlo, serán las próximas generaciones quienes más lo resentirán.

Decenas de chicos y grandes que se dieron cita en el evento, consintieron con un movimiento de cabeza el llamado del mandatario estatal, convencidos de que es tiempo de defender a la Tierra y cada uno de los espacios llenos de vida, que sólo la naturaleza puede dar, tal como el escenario que tuvieron frente a ellos durante la conmemoración del Día Mundial del Medio Ambiente: un riachuelo cristalino que invitaba a darse un chapuzón y decenas de árboles gigantes que protegían el canto de una variedad de aves.

En primera fila, estaban los “apaga-fuegos”, esos que, sin importar la hora o las inclemencias, dieron el todo por el todo para salvar los pocos árboles de aquellos parajes que antes lucían repletos de color verde. A ellos, el gobernador Silvano Aureoles entregó reconocimientos por su labor, esa que es poco conocida y debiera ser más aplaudida: combatir los incendios forestales.

También estuvieron ahí los alumnos y alumnas del CECyTEM, que además de aprovechar el espacio para internarse entre los árboles y presentar diversas piezas de ballet folclórico, de manera simultánea también participaron en otros puntos del estado en las brigadas de limpieza.

Luego, el mandatario estatal lanzó un reto: “podemos construir un gran acuerdo y ser pioneros en la materia”, su propuesta, que a la par de las huertas de frutos y otros cultivos, se delimiten áreas de árboles que tengan como vocación la recarga de los mantos freáticos; porque “una cosa no está peleada con la otra”.

Secundó al gobernador el encargado de la Secretaría del Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial, Ricardo Luna García, quien sostuvo que en los últimos tres años, 35 mil hectáreas se han declarado como áreas de conservación y restauración.

Los rostros de los asistentes se llenaron de asombro, mientras que algunos susurraban “tiene razón, sí se puede hacer eso”. Los más jóvenes escuchaban atentos, como si tomaran nota mental de la propuesta.

Así, el sol, la lluvia y el viento que enmarcaron la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, se hicieron presentes con el propósito de recordarnos una sola cosa: tenemos un solo planeta y nos lo estamos acabando.

A estas alturas, la moneda está en el aire; depende de quienes vivimos en este estado, en este país y en el mundo, rescatar nuestro futuro, empezando por el día de mañana.