Apicultura, debilitada y lastimada en Michoacán
MORELIA, Mich., 29 de agosto de 2023.- Hay varios factores que debilitan y lastiman mucho a la apicultura en Michoacán, externó Erick Legaria, consultor en conservación de la biodiversidad y apicultor, quien externó que incluso hay leyes no claras con respecto al tema.
Un factor social, por ejemplo, es la brecha generacional, indicó, "todos los que somos mayores de 50 años nos acordamos de cuando íbamos al Oriente de Michoacán, al Estado de México, a Tierra Caliente o hacia Guanajuato, que veíamos colmenas por todos lados en la carretera, se veía el camino de colores, se veían tantas como vacas, y de un tiempo para acá ya no hay con colmenas por ningún lado".
Esta situación se dio porque ha dejado de ser también ganadería, refirió, y ha sido así porque somos un estado agrícola, entonces el uso de agroquímicos ha sido desmesurado, ha sido variado, ha sido enriquecido y ha pasado de ser algo benéfico para la producción intensiva de alimentos, a ser algo que lastima justamente por los agroquímicos y los transgénicos que están metiendo.
Erick Legaria manifesto que para que los transgénicos produzcan, se le tienen que echar agroquímicos que provocan, más que la muerte de las abejas, que se contaminen los productos de la colmena, "entonces tú ya no tienes ganadería porque no puedes comercializar una miel contaminada con exceso de fósforo, infectada con neonicotinoides o con complementos proteicos que no tiene nada que hacer ahí en la miel", aseveró.
Esto también altera los ciclos de las abejas, externó el experto, y también altera los ciclos de los cultivos que no son transgénicos, porque acaban con otros animales que consideran plagas, y esos eran lo que controlaba las hormigas, las lagartijas o arañas, y todos estos animales en el campo acaban en una colmena terminando con las abejas porque ya no hay depredadores naturales de estos animales.
Entonces el uso de transgénicos o agroquímicos para hacer intensivo un cultivo, para que produzca más, explicó, ha provocado una alteración en todos los demás seres que se alimentaban de ese lugar que antes era bosque y ahora es, por ejemplo, aguacate, que antes era bosque o selva media y ahora son cultivos de berries, ya que por todos lados hay macrotúneles y cada vez crecen más, indicó.
Hay una lucha en el campo, permanente, dijo, y también hay una lucha social permanente para sostener a las abejas, y por otro lado debe haber una lucha institucional que no funciona, porque las entidades que tienen que encargarse de las abejas no tienen programas de prevención o de fomento, aseguró.
Al respecto, Legaria Rodríguez aseveró que la propia ley que se llama "de Fomento a la Apicultura de Michoacán, no es tal, solamente es una ley de controles y punitiva, "es una ley que no tiene un reglamento que se aplique porque no se aplica, porque ahí dicta quiénes son las entidades que tienen qué ejercer los reglamentos y las leyes para la ganadería apícola en Michoacán".
El asunto es, señaló, que ni siquiera tienen un traje especial los inspectores dedicados la revisión del ganado apícola, ya que no hay equipo ni presupuesto ni experiencia ni capacidad técnica para llevar a cabo un estudio de una especie que ya está en peligro de extinción en Michoacán, aseveró el experto.