Registra Michoacán 36 quejas por violencia política de género en 2024
MORELIA, Mich., 26 de agosto de 2024.- Con corte al pasado 22 de agosto, en lo que va de la presente anualidad, el Instituto Electoral de Michoacán (IEM) ha recibido 36 quejas por violencia política en razón de género, por violencia simbólica, obstrucción al ejercicio del cargo, violencia digital, y violencia física y psicológica.
De acuerdo con el Informe de la Secretaría Ejecutiva del IEM, presentado este lunes en sesión pública del Consejo General, de las quejas presentadas 13 han sido desechadas por falta de competencia o incumplimiento de requisitos.
De las quejas presentadas 10 fueron resueltas, cinco a favor del denunciado; cuatro se remitieron a otra instancia; cinco casos permanecen en trámite dentro del IEM, mientras que cuatro están en el Tribunal Electoral del Estado de Michoacán (Teemich).
El informe detalla que dos quejas resultaron en la imposición de medidas cautelares y siete en medidas de protección; en dos casos se acreditó el cumplimiento de las medidas cautelares y en siete el cumplimiento de las medidas de protección.
De las quejas remitidas al Teemich, dos fueron trasladadas a otras instancias y cinco se declararon inexistentes. Sólo tres quejas fueron declaradas procedentes. El informe del IEM revela que mientras 91.67 por ciento de las denuncias por violencias política de género se desechan, apenas 8.33 por ciento de los casos se resuelve a favor de las víctimas.
Y es que, a pesar de la gravedad de las acusaciones, varias de estas quejas llegan a ser desechadas como consecuencia de la falta de un marco normativo que permita acreditar este agravio que se infringe de manera sutil y silenciosa, por lo que presentar pruebas se vuelve una odisea para las víctimas.
Las quejas casi siempre son desechadas por falta de competencia, o bien son resueltas como inexistentes por el Teemich. En el expediente IEM-PESV-02/2024, una regidora denunció violencia digital, la cual fue inicialmente desestimada, pero luego el Tribunal reconoció la existencia de violencia política de género y sancionó al denunciado.
Este panorama genera dudas en torno a la capacidad de los entes obligados de proteger los derechos político-electorales de las mujeres.
Pese a que en las últimas décadas la clase política se ha abanderado de discursos proteccionistas en favor de las mujeres, en los hechos se padece la falta de mecanismos jurídicos que permitan el acceso a la justicia.
Y es que, muchas de las quejas llegan a ser desechadas como consecuencia de la falta de un marco normativo que permita acreditar este agravio, que se infringe de manera sutil y silenciosa, por lo que presentar pruebas se vuelve una verdadera odisea para las víctimas.
