Designación de Bugarini en Morena genera diferencias en las bases
MORELIA, Mich., 14 de noviembre de 2021.- La designación de Guiliana Bugarini Torres como delegada de Morena en Michoacán ha generado diferencias entre las bases, inclinados unos al rechazo ante lo que consideran una imposición, en tanto que otros, a trabajar con el cumplimiento de compromisos políticos adquiridos.
Durante la realización del encuentro de consejeros y coordinadores del partido guinda en la entidad Somos Obradoristas, que tuvo lugar este domingo, Adán Barajas Villalobos, consejero de Morena, destacó el rechazo de las bases partidistas ante lo que denominó como un nombramiento por dedazo de Guiliana Bugarini.
Esto, debido a que los vínculos familiares de la delegada estatal de Morena permitirían cuestionar el tránsito hacia un partido de familia, donde se retomen las prácticas cupulares y la exclusión de las bases que se registran en otras organizaciones políticas.
“Nos estamos convirtiendo en el viejo Partido Revolucionario Institucional (PRI), con candidaturas entregadas a amigos y a quienes tienen cómo comprarlas, con nombramientos por dedazo”, reiteró.
Insistió en que los integrantes fundadores de Morena en la entidad no están conformes con la designación de Bugarini Torres, y destacó que la realización de prácticas de imposición se da desde 2018, cuando la mayor parte de los secretarios del partido guinda optó por buscar candidaturas a puestos de elección popular, y grupos que arribaron, como el encabezado por Carlos Torres Piña, ahora secretario de Gobierno, y experredistas, tomaron posiciones, mientras que “a los consejeros no nos tomaron en cuenta”.
“No estamos de acuerdo con las imposiciones, y la compañera (Guiliana Bugarini) es una imposición... y ahora el gobernador (Alfredo Ramírez Bedolla) fue tan plural, que hasta gente de Morena metió en su gabinete”, refirió Adán Barajas.
Por su parte, Eleazar Avilés Núñez, consejero de Morena, se pronunció por el cumplimiento de los compromisos políticos adquiridos y priorizar el proyecto de nación y estado, para lo cual “los compañeros que se integren se deberán apegar a las máximas del partido y el mandato de los votantes”.
Agregó que se precisa implementar una dinámica de unidad para “apoyar con todo” al gobernador Ramírez Bedolla, inclusive cuando esto represente “tomar decisiones para asumir compromisos que no nos gustan, pero no es como para claudicar”.
Reconoció que en el seno del partido existen las diferencias, pero de fondo, no de forma, y se estarán resolviendo satisfactoriamente mediante el diálogo.
Cuestionados sobre la posibilidad de que estas diferencias lleven a la formación de grupos que tengan el potencial de fragmentar a Morena, los consejeros mantuvieron su discurso divergente.
“Tenemos una complicación muy fuerte, porque estos grupos ya existen, en Morena no estamos ajenos a eso, y están haciendo su peso en el gobierno en busca de canonjías... como partido hemos quedado a deber demasiado”, expresó Barajas Villalobos.
Eleazar Avilés señaló que “tenemos que continuar con los trabajos de formación política de nuestros cuadros, porque se cometen errores, pero hay que corregirlos”.
Indicó que actualmente la dirigencia estatal se encuentra incompleta, con cuatro carteras designadas y 10 acéfalas.
Descartó que la convocatoria a eventos y actividades políticas por parte de las bases, sin intervención de la dirigencia estatal, sea una señal de ruptura, ya que esto se admite en Morena.