Transfusión de sangre a menores se haría aunque se oponga quien autoriza
MORELIA, Mich., 30 de mayo de 2023.- Cuando por diagnóstico médico y para salvaguardar la salud o la vida de niños o adolescentes sea necesario realizar una transfusión sanguínea, deberá hacerse aun cuando exista oposición de quienes tienen derecho a autorizarla, de acuerdo con el dictamen aprobado por la Comisión de Salud del Congreso del Estado.
Las diputadas integrantes de esta Comisión, Rocío Beamote, Julieta García y Lariza Pérez consideran que no existe nada por encima del interés superior de la infancia y adolescencia, por lo que debe ponderarse por sobre cualquier creencia, uso o costumbre, el derecho a la vida y la protección de la salud, aun cuando ello confronte el derecho a la libertad de religión de los padres y del propio menor de edad.
Argumentan que la Constitución reconoce que los padres tienen el derecho de tomar decisiones libres sobre sus hijos, tanto en el campo de la salud como en el ámbito religioso, es decir, los padres son quienes están legitimados para autorizar cualquier procedimiento médico sobre sus hijos menores de edad, y también son libres de instruirles las prácticas que decidan conforme a sus convicciones religiosas y, consecuentemente, el Estado está obligado a respetar el libre ejercicio de estos derechos sin interferir con ellos.
Sin embargo, los derechos parentales encuentran su límite en la salud y vida de un menor de edad, pues, las decisiones médicas de los padres sobre sus hijos, aunque inicialmente protegidas por un claro campo de autonomía, no pueden ser sostenidas si ponen en riesgo la salud del menor, aun cuando esta no sea necesariamente la intención de los padres, señalan en el dictamen.
Consideran las legisladoras que la libertad religiosa y el derecho a la vida privada familiar no comprenden la imposición de prácticas religiosas que comprometan la salud y vida de los niños, en otras palabras, la libertad religiosa no confiere a los padres la autoridad para decidir sobre la vida o la muerte de sus hijos menores de edad.
Es por ello que dictaminaron a favor de la iniciativa presentada por la diputada Rocío Beamonte, hace un año, pues tratándose de procedimientos médicos que impliquen una transfusión sanguínea que regenere la salud o salve la vida de un infante, esta debe practicarse aun sin el consentimiento de los padres o quien ejerza la patria potestad y con intervención del Estado.