Visiones y percepciones/Etelberto Cruz Loeza
VISIONES Y PERCEPCIONES
Etelberto Cruz Loeza.
¿LEGALIZAR LAS DROGAS?
ÉSA ES LA CUESTIÓN.
Nuestro país, está desde hace varias décadas en una guerra que está perdida de antemano: el combate a las drogas, particularmente a la mariguana – cultivo, transportación, comercialización, venta y consumo – así como de las otras más caras y peligrosas, como la heroína, opio y morfina y las llamadas sintéticas – LSD y demás derivadas y/o compuestas.
Y este combate, esta guerra realmente, lo hace no por situaciones nacionales o porque signifiquen un peligro para nuestra sociedad y sus ciudadanos; lo hace por presión y conveniencia de nuestros vecinos, los Estados Unidos, que casualmente, es el mercado más grande, demandante y caro del mundo.
Curiosamente, el secretario de Estado – el responsable de la diplomacia norteamericana -, Rex Tillerson, el pasado lunes 5 del presente, en Lima, afirmó:…”Lo que nosotros hemos tenido muy claro, en este diálogo conjunto que hemos tenido, es que Estados Unidos tiene que reconocer que nosotros somos el mercado; obviamente, nosotros somos los mayores consumidores de las drogas ilícitas, y, por lo tanto, tenemos que trabajar en este problema, y el presidente Trump lo ha reconocido…Estados Unidos busca establecer redes para combatirlas”.
En esta guerra se han canalizado miles de millones de pesos y han muerto y herido miles de elementos de las fuerzas armadas nacionales, así como civiles – daños colaterales – y delincuentes miembros de los cárteles de las drogas - y la pandemia, como un virus y/o bacteria, sigue y no tiene para cuándo, pues con la casualidad de tener como vecino - como ellos mismos lo reconocen - a los consumidores más demandantes y buenos pagadores y el resultado está anunciado.
Ha habido ideas y hechos sobre una opción, como la de Uruguay que legalizó todo lo referente a la mariguana – desde siembra, cosecha, comercialización y venta -, pero a través del Estado, o como la legislación en algunos estados de los Estados Unidos que está autorizado la siembra, venta y consumo para uso lúdico y médico, en algunos estados como California, aunque la legislación federal lo prohíba.
En nuestro país varias voces han afirmado la conveniencia de legalizar y autorizar el consumo de la mariguana con fines médicos y lúdicos, pero hasta la fecha no se ha dado una definición oficial sobre este asunto, mas recientemente, el jueves 25 del pasado enero, el secretario de turismo, Enrique de la Madrid Cordero, a título personal, no oficial, hizo una propuesta: legalizar la producción, venta y consumo recreativo, lúdico, de mariguana en dos de los principales centros turísticos del país, Baja California Sur (Los Cabos) y Quintana Roo (Cancún): “México es tan grande que deberíamos pensar en ejercicios diferenciados. Así lo han hecho en los Estados Unidos, donde a pesar de que, a nivel federal, sigue prohibido el tema del consumo y la producción de mariguana, es un hecho que en diferentes estados, como en California, ya se legalizó para fines médicos y recreativos. Es absurdo que como país no demos ese paso…me gustaría ver qué se puede hacer en Baja California Sur y en Quintana Roo, los dos principales destinos turísticos de México, que no tienen que ser víctimas de la violencia de un trato inadecuado del problema de las drogas en México. Nos haría un enorme daño perder esos destinos turísticos por el tema del combate al narcotráfico. El hacer legal, no solamente el consumo sino la producción y venta de la mariguana, que no de otras drogas, contribuiría junto con otras acciones a destinos más seguros. Lo que no se justifica es que un consumidor vaya a dar a la cárcel porque consume mariguana. Lo que no se justifica es que sea víctima de extorsiones porque consume mariguana. Tampoco creo yo que se justifique desviar recursos de escuelas y de hospitales para combatir el crimen que, científicamente hablando, la mariguana es mucho menos dañina que el alcohol y que el tabaco.
Esas fueron sus palabras que generaron una catarata de comentarios y posicionamientos y, muy posiblemente, estará en la agenda política de las campañas políticas. .