Tras bambalinas
Cobardía e Infamia
Resulta lamentable y por demás preocupante que, justo al término del sexenio, el actual régimen aprieta las tuercas contra todos los que considera sus “adversarios”. Pero lo ha hecho de la manera más infame y cobarde: contra mujeres.
Una madre buscadora, una académica investigadora, una senadora y una candidata presidencial. Se entiende que, en todo proceso electoral de estas magnitudes, hay muchos intereses en juego, pero baste recordar que AMLO está en desacato.
De hecho, Xóchitl Gálvez no sería candidata, si el presidente de la República no le hubiera negado el derecho de réplica por difamación y divulgación ilegal de datos personales y fiscales. La Corte ordenó otorgar la réplica; él, simplemente se negó.
Fue la primera cobardía. Ahí nació una candidatura que ni siquiera estaba pensada. Luego se fue de frente contra Lily Téllez, cuando ésta lo retó a acudir al Senado para la ceremonia de la condecoración de la medalla Belisario Domínguez.
Desde entonces, AMLO no ha vuelto al Congreso de la Unión. La semana pasada arremetió contra Cecilia Flores, una mujer que ha perdido a dos de sus hijos; no culpa a la 4T, porque uno de ellos desapareció en el 2015. Sólo quiere buscarlos.
Ahora, la embestida contra María Amparo Casar, por la muerte de su esposo, ocurrida hace 20 años, es la expresión más vil que pone en relieve un talante dictatorial. Tras dos décadas, convierte una muerte en suicidio.
Octavio Romero dice que Pemex busca recuperar 31 millones de pesos, más intereses y otras prestaciones que la paraestatal brindaba al marido de la politóloga desde el 2004, cuando empezó a recibir la pensión por viudez.
El hecho es que, Andrés Manuel López Obrador y Octavio Romero, no han podido responder, ni han hecho referencia alguna, a la investigación que desde hace dos semanas difundió Mexicanos Contra la Corrupción (MCCI), que dirige Casar.
La desproporción entre la venganza que quiere ejecutar ahora el régimen, por lo revelado en el reportaje sobre Pemex, es descomunal y hasta irrisoria y nos lleva a Javier Núñez López.
Según la investigación de MCCI, esta persona, desde la Dirección Corporativa de Administración y Servicios de Pemex, firmó contratos, con asignaciones directas, por 100 mil millones de pesos, a empresas ligadas a familiares de López Obrador.
La investigación revela que, desde septiembre del 2022, el diario Reforma informó que Núñez López fue denunciado ante la Secretaría de la Función Pública y PGR, por recibir sobornos a cambio de contratos. No pasó nada.
En la “Mañanera”, los reporteros no han preguntado sobre esto, pese a las implicaciones que conlleva, pues resulta que los tres presuntos implicados son, casualmente, de Tabasco.
La investigación de MCCI conecta también con la organización Austeridad Republicana, creada en 2007 y presidida precisamente por Javier Núñez López e involucra seriamente a Marcelo Ebrard cuando fue jefe de gobierno de la CDMX.
Núñez López fue director de Recursos Materiales con López Obrador en la Jefatura de Gobierno, del 2000 a 2005. Entre sus funciones, estaba, ¡mire usted que casualidad! asignación de contratos.
MCCI señala que entre 2008 y 2012, Ebrard asignó directamente 19 contratos por más de 92 millones de pesos a Javier Núñez López, presuntamente para financiar el movimiento de Andrés Manuel López Obrador.
Esa fue una de las fuentes de financiamiento de la autodenominada “Presidencia Legítima”. MCCI asegura que la mayor asignación se hizo a través de SAD Desarrollo y Transparencia, en la que aparece como socio Javier Núñez.
En el 2018 fue nombrado director de Administración en el ayuntamiento de Jalapa, de donde es oriundo Octavio Romero Oropeza. Núñez es uno de los implicados por la ex diputada morenista Eva Cadena en la recepción de fajos de billetes.
Ella había sido captada, en 2017 cuando presuntamente recibía dinero para financiar la labor política de AMLO. Tras el triunfo de éste en el 2018, Núñez López asumió la Dirección Corporativa de Administración y Servicios de Pemex.
MCCI señala que Núñez López firmó contratos por más de 23 mil millones de pesos con Baker Hughes en tan sólo 10 meses. Baker Hughes es la firma involucrada en la renta de la famosa Casa Gris a José Ramón López Beltrán.
MCCI señala que Núñez también firmó contratos hasta por 63 mil millones de pesos con empresas de la familia Miguel Bejos, el mayor contratista del gobierno de AMLO. Sus compañías han obtenido diversas obras públicas, como el Tren Maya.
A esta familia se le vincula con tres polos de desarrollo en el Corredor del Istmo de Tehuantepec, donde se inauguró el Tren Transístmico. Este es el legajo de sospechas que se tienden en torno a las investigaciones de MCCI.
Lejos de aclarar, desmentir o responder, el régimen de la 4T aplica un golpe brutal y muy bajo a sus oponentes. Veinte años tardaron para “descubrir” que una muerte por accidente, fue en realidad un suicidio.
Estos son los hechos por los que AMLO y su cofradía tendrán que responder, con la misma rapidez que descubrieron que el crematorio clandestino en Iztapalapa era de perros y no de humanos. Esto es infamia o cobardía, como prefieran.
