Tras bambalinas

La yunta y el arado, o metralletas 

Por Jorge Octavio Ochoa 

A Dolores Castro, un ser humano más allá de este universo   

De la ingenuidad, pasamos a la puerilidad. 

Por primera vez en estos tres años de gobierno, López Obrador admitió ya que la ola de violencia es “un problema muy grave”; 91 homicidios, el 75 por ciento vinculados al crimen organizado, dijo. 

Esto no es de abrazos por balazos. Las bandas criminales no cambiarán las metralletas por la yunta y el arado, eso es un hecho. Por eso el régimen empieza a cambiar el discurso  

En medio del fracaso, el régimen anunció una posible legalización de drogas “blandas”, como la mariguana: “Hay un grupo de analistas del Gobierno” que estudia la posible legalización de drogas no destructivas o con efectos leves. 

Ahora resulta que nos trucaron el discurso. La violencia de los cárteles y el crimen organizado se ha desatado. Según expertos en seguridad, nacionales y extranjeros, el gobierno federal ya perdió el control.  

Son ejecuciones, tortura, masacres, con una crueldad sólo equiparable con las imágenes de guerra que ni siquiera en Ucrania hemos visto. El régimen admitió ya que el 75 por ciento de los homicidios en México están vinculados a cárteles. 

LEGALIZACIÓN DE MOTA ¿CONCESIÓN O DERROTA? 

Lo más grave, es que ese viraje discursivo sobre las drogas parece más una concesión, una cesión del derecho de piso para paliar la derrota o, peor aún, para negociar y entregar el control territorial a sólo uno de los cárteles. 

Esto ocurre también, en medio de uno de los escándalos judiciales más grandes que haya vivido México en toda su historia, con un Fiscal General de la República sostenido sólo por la voluntad presidencial, pero ya sin legitimidad ni autoridad moral. 

Gertz Manero es hoy, en el escenario político, una figura vil que envilece al Poder Judicial en México, que no sólo fraguó toda una historia con delitos inexistentes para encarcelar a su cuñada y a su sobrina. Se ha enriquecido inexplicablemente. 

La Fiscalía de la Ciudad de México se suma a esta desgracia, al haber reabierto una carpeta judicial para meter a la cárcel a una anciana por no saber cómo actuar para cuidad a su marido, convirtiendo así la ignorancia en un delito grave. 

Es de escándalo pues, con aparatos institucionales literalmente doblados y sojuzgados por el poder presidencial, que además ahora se empeña en poner en la picota a las autoridades electorales para hacer totalmente su voluntad. 

LA AMENAZA vs EL INE 

Cínicamente, como si tuviera realmente un logro que pudiera considerarse como aprobatorio, el Presidente de la República va en pos de una consulta que no pidió el pueblo, y que sólo busca reposicionarlo a él y destrozar al Instituto Nacional Electoral. 

Impúdicamente, en abierto desacato de las disposiciones legales, el presidente lanzó a su secretario de Gobernación a promover dicho evento, para arengar estúpidamente “¡No estas solo!” y uno se pregunta: ¿Contra quién? 

Adán Augusto López viajó en un avión de la Guardia Nacional a Tabasco, acompañado por el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo; el de Tabasco, Carlos Manuel Merino, el subsecretario de Seguridad y protección Ciudadana (SSPC) Ricardo Mejía Berdeja y funcionarios del gabinete estatal, alcaldes y diputados. 

Pero también venía ahí el presidente del CEN de Morena, Mario Delgado. Todo esto podría constituir un delito grave, por el uso ilegal de recursos públicos. Como se ve, al régimen lo empiezan a perseguir sus propios fantasmas, sumido en una extraña prisa para acomodar a las instituciones a su favor.  

ESA PRISA, QUE MUEVE A RISA Y A TRÁGICO DOLOR 

Es una comedia patética, porque toda la estulticia y corrupción de los de antes, se ha posesionado de los de ahora, con un discurso todavía más insolente que antaño: el Secretario de Gobernación dice que fue con la autorización del presidente Andrés Manuel López Obrador. 

¿A qué fue? A promocionar ese “ejercicio democrático”, aunque ellos saben perfectamente que, para ser válido, deberá contar con el 40% de los 92 millones de ciudadanos empadronados. Es decir, 37 millones 129 mil 287 electores por lo menos. 

A una semana de la consulta, el titular de Segob viajó a Coahuila y Sonora en abierta promoción y amenazó al INE: Dijo que “Si en alguno de los excesos del INE” optan por despedirlo, él se plantará en las calles Pino Suárez y Niños Héroes a decir que fue un honor que lo corrieran por apoyar a López Obrador. 

Por eso es que ellos, la nueva élite en el poder, presentarán una iniciativa de reforma electoral para remover a las actuales autoridades electorales. Serán “delegados de sus cargos”, declaró admonitorio el actual encargado de la seguridad interior del país.  

Es evidente que MORENA está preparando su próxima asonada, para alcanzar nuevas mayorías más allá de la verdadera voluntad popular. Al pueblo no le interesa su consulta, no ha terminado de entender para qué sirve, y lo han metido en un galimatías que seguramente responderá con su indiferencia. 

En la pasada consulta popular en la que la ciudadanía tuvo la posibilidad de decidir si se debía llevar, o no, a juicio a cinco ex presidentes de México, solo participó el 8% del padrón electoral, es decir unos siete millones. Casi 85 millones de mexicanos no votó. ¿Usted cree que esa voluntad cambiará? 

Izquierdas o derechas, como podemos ver, son iguales. Hipócritas, facciosos, toman el poder y las cosas como si fueran propiedad personal. Vivimos en un mundo de rufianes. 

Así pues, lo que tenemos hoy, siguen siendo malas noticias. Algo anda mal en el mundo, cuando Dios se está llevando a los mejores y nos está dejando aquí a los peores.  

Dos años de pandemia, de muerte y separación, solo dejaron más división y ánimos violentos. Un mundo en guerra, por intereses meramente humanos. Y nada nos vamos a llevar: solo polvo, muerte y más muerte que hemos provocado. Esa es nuestra naturaleza humana.  

Adiós Dolores Castro. Un ser de luz se nos ha ido, y nos quedó lo terrenal. En el mundo real, estamos inmersos en la confusión: entre la teología de lo siniestro, el mal reencarnado; y en lo ideológico, ser de izquierda es lo avanzado, lo democrático.  

Ahora, ser de derecha, es ser avaro pretencioso.  Sin embargo, en la tierra, los dos lados son el infierno.