Toque de nano sabiduría
El proyecto de Dios en Año Nuevo, en el tiempo
Hay un proyecto superior secreto de Dios sobre la historia y la vida. En año nuevo estamos atentos para realizarlo.
Vista panorámica
Queremos un México grande, de hermandad, de paz y progreso, un México en orden, sin caos ni crímenes, que nadie haga daño sobre todo el territorio nacional.
El país que deceamos sólo es posible en el estado de derecho en que la policía ponga orden, en un régimen en que se aplique la justicia universal e imparcial en que se sancione a los infractores y no haya impunidad. Este México se construye en la verdad castigando la mentira y el engaño, en el amor desterrando el odio, la polarización.
La gente siente que no hay justicia en México, no se resuelven los agravios y los crímenes. Vemos que somos los agraviados que tenemos razón, que la justicia está de nuestro lado. Oh, decepción, los jueces y agentes del MP se ponen a platicar con los delincuentes, no aplican la ley, rompen el sigilo, le dan información a la otra parte.
Se colapsa el estado de derecho, los juicios se hacen interminables y los inocentes y nos juzgan, no aplican la justicia. El orden se corrompe y se diluye y vivimos en un pantano sin ley ni derecha ni justicia..
Todo se derrumba, no hay nada en que confiar. Tienen en su persona el poder de restablecer el orden y darle paz a la gente..
Según la doctrina social de la Iglesia el bienestar de un pueblo se construye sobre los valores: “la verdad, la libertad la justicia y el amor” (concilio Vaticano Const. Gaudium et Spes, 26). Es es el camino seguro y necesario para alcanzar la perfección personal y una convivencia social más humana: constituyen la referencia imprescindible a los responsables de la vida pública” (número 197).
Los grandes momentos son para estar con Dios. Si avanzamos con el en la historia todo cambia de sentido, nos lleva a la meta . Con el estamos amparados frente a las turbas de demonios y los sicarios que tienen entre los hombres.
En este fin de año la situación que vivimos es preocupante, grave, caótica. La violencia que hace furor y el gobierno ni los ve ni los oye, mira a otro lado.
Vemos lo mismo en el panorama mundial: guerras, gobiernos que invaden países que cometen homicidios y genocidios. Nadie para a Israel y a Putin, miles de asesinados en Gaza y Ucrania. y Ucrania .
El bienestar, la prosperidad son una palabrita mágica y hueca en los discursos oficiales.
Se desmorona el país: los avances democráticos, el régimen de libertades , el derecho de la persona y de las mayorías, más allá del oficialismo .
Un mundo que pierde sus valores, respeto la persona humana, a la vida humana, que desnaturaliza la relación entre hombre y mujer y que la carta de ciudadanía a desviaciones y aberraciones que van contra la naturaleza y el orden cósmico.
La impunidad campea, criminales que asesinan, despojan. Corrupción y para de al Estado derecho, reina la ley de la jungla, la ley del más fuerte como en los pueblos del lejano Oeste.,,.
Vivimos en un pueblo sin ley, a merced del más fuerte del criminal, del brutal. por eso reina el terror y la sangre corra ante la actitud pasiva de quienes pueden cambiar el destino de la gente.
La luz de lo alto.
Dios es una roca. El nos trae la paz. el puede cambiar la situación de descomposición social
Que la paz reine en nuestro pueblo, la familia y la persona en el 2025. que descienda sobre los campos y ciudades la justicia y el derecho, que todos los mexicanos, liberados del poder de los demonios de su odio y mentira, construyamos, en la verdad, el Estado de derecho, el reino de la justicia, en los campos y construcciones de la redención de México, asumiendo la realidad, expulsando la corrupción, la falsedad y el engaño a los humildes .
El gobierno no sea de unos cuantos, de un partido de ideología, que construyamos con el esfuerzo y la entrega de todo el pueblo, en el trabajo y el sacrificio diario, golpe a golpe, paso a paso, con un pueblo generoso, genial y creativo, virtuoso en la entrega y el sacrificio para el cambio de rumbo el resurgimiento del México adormecido, engañado, atenido y convenenciero.
Que haya un nuevo amanecer, despertar y resurgimiento de la raza de bronce, noble y heroica, que ha forjado con sacrificio heroico el avance real de la nación mexicana.
Que nos convirtamos a la verdad y el bien, que asumamos la lucha de México para salir de la corrupción y de las contingencias, de los derrumbes de la vida nacional y las instituciones democráticas, Que nos despertemos al trabajo creativo y difícil, a la transformación que surge del pueblo, de cada mexicano y mexicana, a la entrega, al sacrificio. El país se construye con la entrega heroica, honesta y sabia de todos.
Que nos sacudamos las malas influencias de la clase dominante, que “no nos vean la cara”, que no nos tomen por tontitoa que se dejan deslumbrar por cuentitos de vidrio y manipular como una borregada.
Que asumamos alegre y generosamente nuestro destino, como grandecitos. Un México grandioso y fuerte no se forja con dádivas, repartiendo gratuitamente el dinero del pueblo y sin un proyecto objetivo de cara a la realidad, de un México grande, campeón entre las naciones, con individuos preparados en su mente y su entrega libre y generosa, digna, de campeón.
Finalmente le damos un lugar a Dios, es el quien construye el México ideal, de verdad, vida digna y un destino maravilloso. Superemos el odio y mentira. Que triunfe la justicia en el 20 25
El nos trae la paz, El es una roca. y en el pueblo todo cambia de sentido
si nos apoyamos en Dios cambiamos los destinos de México según el Proyecto Secreto manifestado en Jesucristo.
La victoria está asegurada en la lógica y el Proyecto de Dios.
Vencemos al mal y empezamos a construir, no en la narrativa y dogmática oficial, no el país de declaraciones mágicas, de quien solucionan los problemas con una palabra que pretende ser todopoderosa, no un país el mejor del mundo en la realidad virtual, en la burbuja del poder, en la narrativa disparada, muy alejada de la realidad del pueblo.
Construimos el destino verdadero y grandioso de México en la verdad y justicia de Dios.
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