Tigres de arena
Rehenes
Los 36 millones de rehenes electorales adeptos al movimiento del sótano de la historia se multiplican en actos públicos y privados, concertando pequeñas asambleas o tribunales populares, donde se juzga a los gobernadores no alineados en turno y donde el “pueblo bueno” manifiesta su beneplácito en torno a las figuras de la bifronte presidencia mexicana.
36 millones que pueden dividirse en 16 propiedad del crimen organizado, 10 que pudieran ser leales votos al movimiento oficial y otros 10 que son rehenes del sistema y cuyas vidas dependen ya sea de los programas sociales o de algún puesto en la administración pública. Si bien esa masa aparenta ser legitimadora y una fuerza incontenible, la realidad es que hay 90 millones de mexicanos que no respaldan su proyecto político.
Asimismo, el desgastado debate en torno a la sobrerrepresentación ya ha marcado que la proporción en la Cámara de Diputados entre fuerzas oficiales y opositores es de un 54% y 46% respectivamente. Por más que acarreen masas a sus mitines y actos, el repudio y rechazo sigue creciendo hacia su proyecto de gobierno.
Como muy peligroso podría describirse al conjunto de cambios que pretenden realizar en el tramo final del sexenio y han elevado “su apuesta” convirtiendo la reforma al poder judicial en un regalo en bandeja de plata para los grupos del crimen organizado, quienes buscarán destruir desde adentro el último reducto de equilibrio de poderes en México.
El movimiento de la falsa transformación malinterpreta el ejercicio del poder y cree que 36 millones de rehenes electorales lo “autorizan” a efectuar la mayor regresión política de la historia.
Al antiguo régimen se le señalaron muchos errores pero nunca entregó la soberanía a los grupos fácticos ni tampoco atentó contra la vida de los mexicanos como se atestiguó en este sexenio. Seis años bastaron para que el pérfido oficialismo materializara su propia herencia negra para todos los mexicanos, mucho más oscura que la de los 70 años que ellos tomaron como su narrativa de vida.
Antes de cerrar este espacio semanal, sólo resta recordar a quienes integran el Poder Judicial de la Federación y los poderes judiciales estatales que la realidad los ha alcanzado y se encuentran ya en el patíbulo. Ojalá que sus protestas y movilizaciones logren cambiar su avenir.
Los mexicanos no pueden seguir en el letargo de pensar: “mientras no me alcance lo que veo en las noticias no me importa lo demás”; la perversidad del movimiento oficial está por darle el tiro de gracia a la república mexicana y muchos ciudadanos siguen de brazos cruzados leyendo de manera equívoca que la tenebrosa trama transformadora no afectará sus vidas personales.
Hay 90 millones de personas que no son rehenes por más que el partido en el poder sueñe con la dictadura y con perpetuarse. Hay una posibilidad todavía de frenarlos pero se necesitará del esfuerzo de todos aquellos que no están de acuerdo con ellos.
México permanece en la encrucijada.
Bismarck Izquierdo Rodríguez
Secretario de Cultura del CEN del PRI
X: @CulturaCENPRI/@bismarck_ir
FB: @culturacenpri
Instagram: @bismarck_pri