Santiago y El Rufo/Santiago Heyser Beltrán

R- Guauuu, mi Santias, me gustó tu artículo donde analizas el derecho que tienen los habitantes de la isla Sentinel del Norte, en la India, de defender su estilo de vida y de no permitir el ingreso de extraños.

S- ¡Así es, mi Rufo!, la historia de los sentinelenses me hizo cuestionar las formas en las que hemos construido nuestras sociedades, muchas veces con violencia, incluso hoy, atropellando el derecho de los pueblos originarios y peor aún, ensalzando las llamadas conquistas que en el fondo no son más que despojo, abuso y crimen amparado en la ley del más fuerte, así fueran conquistas de Alejandro Magno, de Napoleón, de los españoles, portugueses o belgas, de los israelitas, mal llamados “Pueblo Elegido” de Dios, de los romanos o de Jerjes I, rey de los persas; conquistas que fueron invasiones cimentadas a sangre y fuego, como las realizadas por los gringos en Libia, Vietnam, Irak y Afganistán, las que con falsas justificaciones como las famosas armas de destrucción masiva en Iraq, o la defensa de la democracia en Venezuela, o el combate al narco presidente en Panamá, solo sirven para justificar el robo y agandalle que muchas veces terminan en esclavitud o en la imposición de gobiernos títeres que les permitieran saquear a las naciones y sojuzgar a sus pueblos; lo que en mi opinión daba y da, a los pueblos conquistados, invadidos o sojuzgados, el derecho a repeler con violencia a los extranjeros; que es lo que hoy hacen los sentinelenses… Derecho que hoy se ha pervertido en leyes escritas por quienes están interesados en obtener ventaja de pueblos o naciones a las que se les violenta la soberanía, como en mi opinión, intentan hacerlo USA, Inglaterra y la Unión Europea, al generar conflictos entre Taiwán (parte de China) y China continental; con argumentos falaces como imponer una religión o defender la libertad y la democracia en donde no les llaman y hacerse “patos”, por conveniencia económicas, ante dictaduras como la de arabia saudita.

R- Guarraguauuu, mi Santias, ¿entonces estás de acuerdo en que los sentineleses asesinen a flechazos a quienes quieren ingresar a su isla?

S- ¡Clarines, mi Rufo!, la violencia viene de quién quiere entrar sin ser invitado, además, es un derecho natural, de esa forma los sentinelenses conservan sus riquezas naturales, no les contaminan, no les roban, no les esclavizan, además conservan su cultura, sus leyes, su forma de convivencia y ojo, no le pueden imponer ni religiones ni dioses ajenos, ni llevar plagas y enfermedades.

R- Guau, me gusta tu forma de pensar, mi Santias; pero, por un momento imagina que en México hubiéramos corrido a flechazos a los españoles y a los gringos… No tendríamos democracia, ni televisiones, ni coches.

S- Pero Texas seguiría siendo nuestra… aunque no habría nacido yo, que soy criollo, pero tampoco tendríamos enfermedades, ni pobreza, ni hambre; ni crimen organizado, ni a la DEA y al gobierno de USA queriendo intervenir y vendiendo armas a narcotraficantes; tampoco hubiéramos tenido la “dictablanda priísta”, ni el robo y desfalco de quienes nos han gobernado; ni usaríamos pesticidas y químicos para cultivar.

R- Guauuu, siguiendo con el ejercicio imaginativo, mi Santias: estaríamos corriendo a flechazos a los centroamericanos y haitianos que entran a México a la fuerza y agarran impunemente a coscorrones a la “Guardia Nacional”, que de Guardia no tiene nada (cosa de ver Michoacán).

S- Pues sí, tienes razón, perro, no tendríamos muchas de las cosas que traen la modernidad y las conquistas armadas, financieras y/o comerciales, pero estoy convencido de que viviríamos mejor; porque en esencia: ¿quién me puede demostrar que es mejor vivir en la semiesclavitud del trabajo subordinado y la contaminación que vivimos, eso sí con Netflix, Internet y celulares, VS, vivir de forma natural, con respeto a la vida y a la naturaleza, en libertad, enseñando a nuestros hijos a cazar, a recolectar frutos y a pescar, respetando la naturaleza y la vida, sin plagas ni pandemias, conviviendo con nuestras familias, mientras amamos a nuestra pareja y trabajamos en colaboración con nuestros vecinos y familiares?… ¿Qué es mejor o qué prefieres?… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.