¡Sal a votar!/Santiago Heyser
Uruapan, Michoacán, 1 de julio 2018
Con más de 130 aspirantes y políticos muertos ¡Por fin hoy es el día de la elección! ¡Sal a votar!.. ¡Compórtate como ciudadano!... ¡Sé responsable!
No importa por quién vayas a votar, demos a la república el mínimo servicio de cumplir cívicamente con la obligación de votar ¡Sí!, votar es una obligación y el único camino para depurar paso a paso la podredumbre que identifica, salvo honrosas y escasas excepciones, a nuestra clase política y gobernante.
¡Lo sé!, la caballada está flaca, los tres candidatos (decir que son cuatro cuando es una realidad que el cuarto, al que me niego a nombrar porque no lo merece… ¡Nunca debió competir!, ya que solo es producto de la corrupción que permea en nuestras instituciones y tribunales que cada seis años convierten a nuestra incipiente y simulada democracia en una farsa.) ¡Sí!, decía que los tres candidatos son tramposos, contra el espíritu de la ley, para usar dineros públicos, abusivamente los tres hicieron precampañas, definidas como el espacio para dirimir las luchas internas por las candidaturas dentro de los partidos, mismas que no existieron, ya que no existieron competencias internas: Meade fue dedazo presidencial impuesto a un PRI inexistente y un Verde corrupto, AMLO se eligió solo en su partido Morena, aplaudido por su rémoras el PT y el PES y Anaya fue producto de una alianza de vergüenza que eliminó la competencia interna en el PAN, a cambio de “cacahuates” para el PRD y MC... ¡Pero ojo!, una caballada flaca no es pretexto para que no salgas a votar, tu obligación ciudadana, estimado lector, está más allá de la calidad de los candidatos. No importa si los tres candidatos ¡Sí los tres!, cuentan en sus equipos con gente de dudosa reputación o peor aún, cuentan con gente de probada deshonestidad cívica, económica y política ¡No hay duda! ¡Lo afirmo!, los tres candidatos van acompañados en sus equipos por algunos pillos que auguran diferentes niveles de corrupción en la próxima administración ¡Gane quien gane!... ¡Aun así tienes la obligación de salir a votar!... La dignificación de la política y la gestión pública es un proceso que requiere de tu concurso como ciudadano, México te necesita ¡Sal a votar!...
Después viene lo difícil, hoy como nunca, México está dividido. El bajo nivel de los contendientes y la ambición desmedida de algunos, solo igualada con la urgencia de dar continuidad para no ser juzgados o por el temor de una clase política y gobernante (y sus asociados), que desesperada ante el riesgo de perder canonjías o la oportunidad de “hacer negocios” con el dinero presupuestal, perdieron el rumbo de su compromiso de servir a México, y como perros y gatos pelearon por acceder al poder, no para servir a México (de nuevo, salvo honrosas y escasas excepciones), sino para servirse de México para enriquecerse, pagar favores o dar empleo a correligionarios, amigos, compadres, parientes y cómplices… Llevándose en ese pleito la unidad nacional, el respeto por el que piensa diferente, la humildad de aceptar que otro puede tener razón y la esencia misma de la democracia: ¡La aceptación de que ganen quiénes piensa diferente, simplemente porque son mayoría!,… por todo, apoyados en guerras de lodo y discursos de descalificación mutua, los tres dejarán un México dividido y confrontado.
No tengo duda: ¡Ninguno de los tres candidatos es demócrata!, pero, citando a Lázaro Cárdenas del Rio: “Estos son los bueyes que tenemos y con ellos tenemos que arar”, por eso debes salir a votar, porque de la misma manera que una brisa mueve una hoja y así tonifica al árbol, tu voto, cada voto, es una semilla de cambio para la República de la que para bien o para mal eres ciudadano con un compromiso que, al cumplirlo, te da derecho a exigir como ciudadano de primera ¡Lo que es urgente! Si no votas, en un interior sabrás que eres paja, basura, nadie para la república; cuando podrías ser parte de la fuerza de cambio que México necesita… ¡No importa si nadie se entera!, si no votas en tu interior sabrás que no cumpliste y no debes tener derechos, por lo que actuarás en tu subconsciente como millones de los que hoy conforman la masa silenciosa de mexicanos que con su apatía o cobardía han permitido que lleguemos a los niveles de degradación que vivimos, en un México donde la corrupción es nuestro distintivo político y de gobierno.
¡Sal a votar!, cumple con tu familia, con tus vecinos, con México y después, olvida los agravios que emanaron de unas campañas caracterizadas por la estupidez y avaricia de los candidatos y el egoísmo y soberbia de sus equipos de campaña y apoya a quién sea ganador; porque es el único camino para que México recupere el rumbo del progreso y la soberanía territorial, económica y política hoy perdida ¡Todos uno! ¡Todos con México!, a partir del 2 de julio… ¡Así de sencillo!
Un saludo, una reflexión.