Rueda de Molino/Jorge Hidalgo Lugo
Rueda de Molino
Nuevo atropello con la complicidad del PRI, prepara López Obrador
Jorge Hidalgo Lugo
Al grito de no “somos tapadera de nadie”, lanzado desde el fondo de su opresora conciencia, Andrés Manuel López Obrador busca intimidar a la bancada del PRI para que apoye su iniciativa de contra reforma energética bajo la amenaza de denunciar en el patíbulo mañanero, el nombre de cada uno de quienes voten en contra de su nuevo obsesivo capricho.
Aunque el amague fue para todo el bloque opositor que hoy está a prueba ante los embates del tirano, la dirección del destinatario fue al grupo parlamentario cuya sede se ubica en la avenida Insurgentes Norte 59, de la Ciudad de México, y de inmediato acusaron recibo por lo que todo hace indicar que va planchando ya su patológica revancha a costa de destruir al país.
Con los aparentes aliados encabezados por Alejandro Moreno “A(m)lito” y Rubén Moreira, la bancada del PRI se puso en el foco de los reflectores y de su actuación en esta nueva embestida intervencionista de López Obrador, dependerá no sólo la frágil credibilidad que aún tienen como partido político, sino podrían también sepultar a la alianza opositora que dio respiro a su penosa existencia.
El efecto del amague causó zozobra de inmediato en A(m)lito Moreno quien a diferencia de los demás líderes opositores, abrió de inmediato la puerta a la “revisión” del tema bajo el pretexto que su voto será para favorecer a los mexicanos.
En cambio el coordinador de los diputados del PAN, Jorge Romero Herrera, avisó que recurrirán ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación a interponer una acción de inconstitucionalidad, en caso de que se apruebe contra reforma eléctrica debido a que se violaría el artículo 25 constitucional al ir en contra de la competitividad y el fomento del crecimiento económico.
Sin que le temblaran las corvas y a diferencia del pusilánime priista, el líder de la bancada blanquiazul se burló de la amenaza de López Obrador y vaticinó que el autócrata les hará un gran favor ya que para ellos sería casi un honor un lance de estas características.
Romero Herrera cuestionó la iniciativa del despótico mandatario debido a que priorizar la auto regulación del Estado en materia eléctrica y pondría en riesgo, el desarrollo económico del país.
Mientras que el coordinador del PRD, Luis Espinosa Cházaro, adelantó que si el PRI vota a favor de la reforma eléctrica se estaría saliendo de lo que acordado por la coalición Va por México, conformada junto con el PAN.
“No nos saldríamos de Va por México si el PRI votase a favor, lo cual yo no estoy afirmando. No quiero adelantar vísperas. Espero que el PRI se mantenga en que votaremos en contra de la iniciativa que mandó el presidente. En todo caso, serían ellos los que se estarían saliendo del bloque, no nosotros, porque es clara la posición que tenemos respecto de homologar nuestro criterio para ir en un sentido en las votaciones”, refirió con apuro.
Mientras tanto López Obrador informó que no acompañará a la maestra Ifigenia Martínez en la entrega de la medalla Belisario Domínguez que le hará el Senado de la República, este 7 de octubre, pues teme que a que una legisladora “le falte al respeto a la investidura presidencial”.
Sin atreverse a dar de entrada el nombre de la legisladora Lilly Téllez, de manera inicial, finalmente la mencionó luego de enviar la misiva donde expresó que no estará en la ceremonia porque: “una legisladora del bloque conservador estaba convocando a que se me falte al respeto y considero que no debemos caer en ninguna provocación que ayude a la élite del poder económico y político, ni a sus empleados y voceros”.
Bajo este contexto la disyuntiva de los diputados federales del PRI, es ver si serán capaces de traicionar en tan corto plazo, el respaldo popular que recibieron por la población que creyó en un bloque opositor capaz de hacer contrapeso a los abusos de poder instrumentados por López Obrador.
Su actuación, sin duda, les redundaría múltiples beneficios personales y multimillonarios recursos que les obsequiarían los que se presentan como “incorruptibles” y celosos combatientes de la “deshonestidá” política.
Pero difícilmente lograrán borrar el estigma de haberse vendido a las primeras de cambio y ser aliados sumisos del dictador que demostraría así, ser capaz de ejercer cuanta trapacería se le antoje, con tal de salirse con la suya.
La presunta compra de conciencias de la bancada del PRI que se avecina, también dejaría sin viabilidad alguna nuevas alianzas a conformar con PAN y PRD, y hasta Movimiento Ciudadano, en los comicios que tendrán lugar el año entrante en Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas, allanando desde ahora el camino para que Morena se apodere de todo el país y sin necesidad de recurrir a sus narco aliados.
López Obrador va por todo con la maiceada que se anuncia en la bancada federal del PRI, pues con esto también dejará desarticulada cualquier intentona de bloques opositores para el 2024, lo que incluye por supuesto su ambición reeleccionista.
De este tamaño lo que está en juego y que comenzó con la amenaza de sacar los muertos que tengan en los clósets los diputados que se atraviesen a su paso.
Vale…