Romper el pacto patriarcal/Gerardo A. Herrera Pérez
Hace unos semanas diversas organizaciones de la sociedad civil convocaron al taller “Ven y deconstruye el mandato de masculinidad: interpelemos al patriarcado”; dicho taller fue diseñado con el propósito de adelantar las masculinidades de los varones participantes en sus procesos para alcanzar masculinidades positivas.
El taller tuvo tres momentos: el primero, compartir las experiencias de ser hombre y cómo se construye el concepto de masculinidad en el día a día; además de trabajar en el cómo se integra el saber, el poder, la autoridad y el ejercicio de la sexualidad; y la situación que se viven con el machismo.
El segundo momento, llevó a preguntar y analizar acerca de “romper el pacto patriarcal”, para lo cual se retomaron las reflexiones sobre las apreciaciones personales de los participantes respecto de que es la masculinidad hegemónica y como se desarrolla en el hogar, sus impactos y la violencia.
La reflexión se centró en las posiciones teóricas que definen varias feministas sobre el pacto patriarcal?, pero en concreto Rita Segato, la cual expresa que “Es cuando solo el hombre se considera a él y a otros congéneres como sujetos de derecho y la mujer un objeto de deseo de los sujetos. De esa forma, se las despoja de todos sus derechos y las mujeres deben de probar una y otra vez que somos personas”.
Rita Segato, antropóloga y feminista argentina, aborda la problemática, desde la perspectiva sobre la defensa absoluta e incuestionable hacia los derechos del hombre agresor y cómo todas las persecuciones y sospechas siempre son hacia la víctima, es decir, la mujer; una mirada constante sobre las mujeres que son objeto de la culpa por ser sujetos inmorales (principalmente por la forma de vestir y arreglarse, caminar y conversar).
Para Segato, los hechos se presentan de manera cotidiana, y precisa que “nosotras lo hacemos de forma automática: cuando nos miramos al espejo y pensamos si nos ponemos una blusa ajustada o suelta, a eso lo hacemos de manera indolora e incolora porque no nos damos cuenta de todos los cálculos que realizamos todos los días sobre cómo nos vamos presentar bajo la mirada del otro, para que el otro nos vea como sujetos morales. En cambio, el hombre lo hace para ser visto como sujeto potente y esa es una gran diferencia”, y ese será el control asimétrico y androcéntrico que realiza el hombre frente a la mujer.
El tercer momento, permitió ir construyendo algunas propuestas de como participar y comprometerse con los proyectos de familia, de igual manera se planteó como evitar la violencia y de qué manera planear el trabajo doméstico y de cuidados dentro del hogar por parte de los varones.
Con participantes varones casados, que residen en varios municipios de Michoacán, se concluyó el primer taller de “interpelemos al patriarcado”; evento organizado por Mujeres de acero, Deportistas con causa, Por amor a mi tierra Apatzingán, OBC, Grupo de Facto Diversidad Sexual en Michoacán y Fundación El Sol.