Proyecto secreto

El poder debe hacer justicia, no “venderse” a gavillas de maleantes que mienten, roban y hacen dinero, contra la ley.
Vista panorámica
La creación es un cosmos, un todo ordenadod, perfecto, obra de Dios. El mundo y la sociedad tienen un orden, con su finalidad y sus leyes. Deebemos respetarlo para vivir en paz, orden y felicidad.
Unos líderes agitan a la gente, en nombre de la zona federal, ostentándose como comuneros, comunidad indígena y no lo son, fingiendo buscar el bien de los niños. En realidad son maleantes, en otras partes y han tomado terrenos y los han vendido para provecho propio, es la maña que quedó con tantas invasiones de terrenos que hicieron los comuneros.
Este caso es sólo uno más de incontables casos que viven cada día los mexicanos.
La gente se queja de faltas en la aplicación de la justicia. es general la impresión que tienen los mexicanos de que no se hace justicia. Hay tantos casos sin resolver, tantos crímenes que quedan en la impunidad. Ya no se cree en la justicia.
Es el problema de la impunidad. Los criminales andan libres tranquilamente porque no los les hacen justicia. “No reprimir es lo que a veces argumentan, las autoridades en el “humanismo Mexicano”. Los funcionarios del poder, “se adornan” afectando ser muy buenos y no aplican la ley.
Con la reforma judicial, no se corregirá este impunidad, tiene de venganza política y no va a las causas que están en el corazóno corrupto, sin ley ni mandamientos.
Hay muchos desaparecidos, asesinados, invadidos en su pequeña propiedad , atacados en su persona o en las persona de sus familiares que encuentran difícil que se les haga justicia, se complican tanto los trámites burocráticos, no se ve la salido del túnel.
Todo es tan claro: en el problema, sólo se busca que se aplique la ley y se haga justicia, se actúa en el Estado de derecho, el afectado piensa: denunció una violación de mis derechos, en mi persona y en mis propiedades, sólo pido que se me haga justicia. Todo se complica tanto, los servidores del poder judicial no sancionan los crímenes, apapachan a los delincuentes, se unen a ellos en contra del inocente. Fallan en contra de la ley y se hace imposible resolver el caso cuando la justicia está tan claramente de tu lado. Los adversarios, maleantes imponen sus intereses en contra de la ley, mintiendo, con aberraciones, en contra del Estado de derecho.
Hay tantos casos de corrupción, tantos crímenes de diversa índole. Como se atenta contra la Constitución, para favorecer a un grupo, a una ideología, en torno a un pseudo héroe.
La luz de lo alto.
No se puede atentar contra el orden público impunemente por el bien de todos los mexicanos.
El mexicano es un ser dado a la corrupción, tranquilamente se “brinca” la ley sintiendo tener la conciencia tranquila.
¿Qué pecado, que crimen es que una autoridad no cumpla su deber de hacer justicia, aprehender al malvado y sancionarlo, haciéndolo pagar por su delito y reparar los daños, restaurando el orden social y manteniendo el Estado derecho y la tranquilidad social?,
Esta justicia es para todos, es imparcial conforme a derecho haciendo cumplir las leyes. Trae consigo, la tranquilidad entre todos, la seguridad, el progreso y la paz.
Es tan simple que el servidor público considera el caso y sin compromiso con nadie, sancione a los criminales, haga justicia a los inocentes.
Infinita tristeza, decepción e impotencia sufre el inocente por el hermano a quien venden contra toda justicia porque la autoridad judicial no juzga del caso y hace justicia sino que miente al inocente, lo presiona y en nombre de la justicia! Lo entrega al criminal.
Varios campesinos y obreros, hondamente conmovidos me han expresado: “es increíble, infinitamente doloroso que los servidores del poder judicial se vendan por ventajas materiales o sociales y fallen a su favor”.
Varios han expresado con lágrimas en los ojos: “por piedad, los servidores públicos del ramo judicial no pueden traicionar al pobre y venderse a la astucia de los criminales”.
Es un crimen innombrable, incomprensible que hace un daño moral infinito e irreparable.
En México, como todo el mundo hay una degeneración de las costumbres, la gente pierde la conciencia moral. No viven sin ley ni un código de ética.
La gente vive sin Dios, fundamento del orden en el universo, ha perdido el sentido de los mandamientos y de la virtud. Son mandamientos que el señor Dios ha grabado en la naturaleza humana y son fundamento del cosmos, de un mundo ordenado: “no rabarás. No mentirás”.
En lugar de la conciencia, la gente sigue su conveniencia. Hace lo que le da la gana. Hay pensamientos absurdos: Freddy Gaona, líder de uno de esos grupos que invaden terrenos, y los venden, afirma: la ley es lo que la gente quiere. ¿Dónde están los mandamientos fundamentales, no levantarás falsos testimonios ni mentirás? Entonces es el caos, sin tener razón gritan, pretenden tener razón, imponen su punto de vista lejos del orden moral. Quieren imponer los intereses, cerrados a la razón, quebrantando el orden público, acabando con el orden público, la armonía y la paz.