Perfiles/Arnulfo Mora
ADMINISTARCIÓN ATRAPADA
Había ofrecido compartir mi opinión sobre ese tan complejo y trillado tema y promesa de campaña de reducirse sueldos el órgano de gobierno y estos aplicar la medida a los funcionarios municipales.
Lo dejare para la próxima porque consideré prioridad comentar el destape del supuesto compromiso firmado entre el Síndico Miguel Ángel Peraldí Sotelo y el finado Pedro Bautista Béjar y su hijo del mismo nombre a su vez Síndico suplente y con la intervención del hoy diputado federal Feliciano Flores Anguiano. No me detengo sobre el móvil que causó la muerte de Pedro Bautista padre porque sería una locura relacionar su partida con este asunto.
Lo que yo asumo como realmente relevante políticamente es la veracidad o no del documento que hizo público este viernes un portal de noticias con sede en la capital Morelia.
Considero de suma importancia que la mismísima alcaldesa asuma públicamente y de inmediato si es verídico o no el supuesto compromiso al parecer firmado por el licenciado Miguel Ángel Peraldí y las personas que ahí se citan. No sé qué será peor, que Itzé Camacho se haga la desentendida, que asuma lo ignoraba, o que acepte lo sabía y lo asumió como un compromiso interno durante su candidatura y luego su campaña.
Si el caso es un invento, y por el bien del municipio yo esperaría que sí fuese una falsedad, pues con mayor urgencia debiera la alcaldesa salir y desmentirlo con todas las fuerzas de su interior porque desentenderse de ello le está generando un tremendo desgaste a su investidura y al de todos ante los ciudadanos ya enterados y que no son pocos y con reacciones nada amables.
Ya eran rumores de que el Síndico Peraldí renunciaría pasando un mes para ceder el lugar al suplente.
Se podría aceptar o rechazar como cierto tal compromiso. Pero ahora aparece un documento con las supuestas firmas de los involucrados con cláusulas marcadas y muy comprometedoras de ser cierto.
El documento cita no solo el compromiso de ceder un cargo público que por ley es irrenunciable porque es el voto popular quien lo elige. No fue un voto hacia personas individuales. Los ciudadanos votaron mayoritariamente por una planilla que presentó el partido ganador.
Pero aún más, el cierto o falso documento cita compromisos de financiar la campaña, no para tal o cual persona, sino de una planilla involucrando a un partido político. ¿Esto habrá sido legal? ¿Lo supo la autoridad electoral? Claro, lo primero es conocer si el documento es verídico, y de serlo, quien sabe que proceda.
Podría yo insistir en mi incredulidad personal a que esto fuese verdad. Me resisto a creerlo y mi apuesta sigue porque sea un ardid salido de los drenajes políticos. De lo que sí estoy convencido es que el asunto merece ser aclarado y precisado a la voz de ya. HASTA LA VISTA.