Perfiles/Arnulfo Mora
Perfiles
Arnulfo Mora
*Las luchas en los partidos
Con solo citar al PRI saltan voces que lo descalifican en todos los tonos. Pero ahí está porque ahí están pocos o muchos priistas buscando reagruparse.
Pero al interior también hay pugnas internas que complican los propósitos de reunificación. No hay que irnos a las cúpulas para ver esa realidad.
Lo vemos aquí en corto con la ex candidata a la alcaldía, Eloísa Berber, que insiste en que se expulsen a los que le jugaron chueco y a quienes culpa de mandarla al quinto lugar en votación en el pasado proceso electoral.
Mientras el CDE se pronuncia por el perdón a los que dieron la espalda y hasta les ofrecen bienvenida, la ex diputada porteña revira en contra y le apuesta a las sanciones, de plano a las expulsiones.
Pero el PRI y los priistas resisten la andanada de calificativos, eso sí, sin entrar a debates con las voces anónimas de quienes los satanizan.
El tricolor está cumpliendo nada menos que 90 años de existencia y sin mirar a los lados pretenden festejarlo con las disminuidas fuerzas y la escasa representación en el poder.
El tricolor ha perdido el poder, ha perdido credibilidad, ha perdido la confianza y el voto de las mayorías. Pero ahí está ese partido buscando su rehabilitación con su estructura intacta.
Cierto, a los priistas les cuesta mucho poner distancia del tenebroso pasado y de quienes lo hicieron fracasar por el abuso, el dispendio, la soberbia y prepotencia en su conducta ante una sociedad que se sintió pisoteada.
Pero en el tricolor no hay deslindes ni desmentidos ni parecen renegar de nada, salvo de sí mismos en algunos casos.
Simplemente el PRI no ha muerto pese a los múltiples sepelios anunciados.
En el caso del PRD y del PAN su ambición por el poder los hizo perder la elección federal y también sus estructuras. Fracturados pero ahí están y no van a desaparecer tan fácilmente.
El PAN parece levantarse poco a poco mientras el PRD su fuerza y figura viene a menos. En las consecuencias los hace diferentes al tricolor.
El caso de Morena se cuece aparte, pero con el mismo fuego y con la misma leña que también lo quema por dentro.
En esencia Morena sigue siendo López Obrador como lo ha sido desde su nacimiento como partido. El capital político de Morena es AMLO, el sustento principal de Morena es AMLO y eso hace que el ahora presidente de la República esté entre sus dos prioridades, el país y su partido.
La falta de una estructura sólida y visible de Morena lo está llevando a verse como los demás, a sufrir como los demás y con facturas muy tempranas que pueden tener impacto en la gobernanza del país.
Las cúpulas de Morena son también de carne y hueso como las de los demás partidos. Los grupos, las ambiciones y las divisiones no pueden ocultarse como tampoco pueden ocultar los efectos en las bases que aún son amplia mayoría con su fe convertida en tributo.
Pese a que no son reconocidas, las diferentes expresiones de Morena ya usan las mismas artimañas y lenguaje que sus adversarios.
Se acusan de traiciones, de venderse al poder y de haberse extraviado de los principios y compromisos que les dieron sustento.
Ahí están en conflicto por la candidatura que se repite para gobernar Puebla, ahí están los conflictos en Baja California de los que una parte acusan a don Leonel Godoy, en Michoacán por la dirigencia estatal, por la representación de los diputados y lo último, la venganza contra los que votaron a favor del Fiscal que recayó en diputado Adrián López Solís propuesto por el gobernador Silvano.
A los fundadores y cuadros de Morena les está costando mucho trabajo darse tiempo para construir el partido que ocupan para seguir unidos y ganando elecciones con una imagen partidista.
Los morenistas en cargos públicos están mezclando el trabajo de gobierno con el interés de un partido en formación. Se confunden porque Morena como partido no existe, no aún por lo menos, pero sí están urgidos de que tome forma y vida propia.
Este descuido les puede costar caro a los cuadros de Morena que han hecho planes para competir en próximos procesos.
Los desprendimientos del PRD más pronto que tarde harán su nido en el partido que sigue siendo propiedad de AMLO. Las entradas y salidas, los caminos y las veredas las construye una sola mano y hay de aquel dedo que señale rutas diferentes.
Y de ahí vendrán nuevos bloques en disputa del poder y de los cargos.
Ahí están frescas y vivas las confrontaciones al interior de los partidos, unos por una causa, otros por razones distintas, pero en la política, parece que las líneas paralelas sí se juntan al final. Durante el viaje, cada pasajero ve el paisaje del color que quiere verlo.
¿ABUSO O GASOLINAZO?
**De extrañarse lo que sucede en este puerto en el precio de la gasolina. Durante la crisis nacional por falta de los combustibles, nuestro municipio fue ejemplo en cuanto al menor precio promedio y se convirtió en centro de abasto por cualquier medio. Se adujo que el menor precio era por el menor costo en el transporte al contar en el puerto con una terminal de abasto.
Ahora el precio por litro está arriba del promedio nacional y no hay quien explique los motivos. Y no, no creo sea culpa del gobierno y mucho menos de AMLO como algunos ligeramente lo exponen. El problema es más en corto y los empresarios del ramo tienen o deben tener la explicación, ojala y la compartan. HASTA LA VISTA