Perfiles/Arnulfo Mora
Circulo peligroso
¿Cuál es el compromiso principal de un maestro? Supongo que educar. ¿Cuál es el compromiso principal de un gobierno con sus empleados? Supongo que pagarles su sueldo.
Si el patrón no les cumple a sus trabajadores, a estos les asiste la razón de suspender su trabajo y reanudarlo hasta que el patrón les pague.
Hasta ahí parece un círculo muy claro, y pequeño.
Pero en nuestra entidad el problema ya involucra a todos, no solo alumnos sin clases, no solo un paro laboral en lo educativo. Un paro y bloqueos que están dañando a la economía, a la sociedad toda.
Tenemos un gobierno que se desentiende de sus obligaciones con sus trabajadores, y tenemos trabajadores que en aras de reclamar sus derechos, paralizan la economía con bloqueos a oficinas públicas y vías de comunicación, ambas esenciales para la estabilidad económica y la paz social que rebasa en consecuencias al estado.
La determinación del magisterio de mantener inamovible las medidas de presión no es solo mantener la presión contra la autoridad. Es una estrategia política que no es nueva ni tiene que ver con sus demandas económicas.
Innegable que hay fuertes divergencias entre el gobierno estatal con el gobierno federal, que tampoco es un problema nuevo ni económico.
El círculo estriba en que cada parte busca aprovechar las circunstancias actuales para inyectarse fuerza política y debilitar al adversario.
Para el gobernador Silvano Aureoles sería un éxito deshacerse de las plazas estatales de maestros y que de ellas se haga cargo la federación.
De lograrlo, sería una estrepitosa derrota de la CNTE porque bien saben que con el nuevo gobierno federal no justificarían la cantidad de plazas cuyo número y su nómina controla y que le da la fuerza y el sustento político que ciertamente tiene.
Hasta ahí pareciera que el problema es entre el gobierno estatal y el movimiento democrático del magisterio.
Pero el gobierno federal no está exento de responsabilidad en todo esto. Sí alguien conoce bien a la CNTE es precisamente el gobierno federal, llamemos directamente al hoy presidente de la República porque son aliados históricos.
Por supuesto que las radicales acciones que en Michoacán lleva a cabo la CNTE son incomodas para el gobierno federal, pero la proporción y más en corto pareciera son para el gobierno estatal.
Lo cierto es que las presiones las estamos resintiendo ya los ciudadanos, los sectores productivos, el comercio y los prestadores de servicios en la región costa.
Las millonarias pérdidas que dice tener el sector empresarial tendrán impacto en la economía del país y las finanzas públicas irán a menos para financiar los programas sociales de los tres niveles de gobierno.
Michoacán ya tiene síntomas de ingobernabilidad y de paralización en sectores de la economía y buena parte del alumnado está estancado y en franco retroceso sobre el ciclo educativo.
No son daños colaterales, son perjuicios directos por acciones directas consecuencia de dos gobiernos en pugna y un brazo político que se pone a la sombra de su siempre aliado y hoy protector.
La inseguridad en las carreteras del estado no es un problema ajeno. Hay terrorismo contra el transporte de carga y de particulares en la mal llamada autopista Siglo 21. Y esta es una vía federal pero que el gobierno federal no atiende porque no es su prioridad.
Pareciera que al no haber movimiento del ferrocarril, estarían haciendo su agosto el transporte de carga por carretera. Increíblemente no es así porque lo impiden las reglas de origen tanto de importación como de exportaciones y no pueden cambiarse el tipo de transporte de improviso.
Pero además, están al día los atracos armados a los transportistas a los que roban o les destruyen unidades como apenas ocurrió el viernes en plena tarde por encapuchados en esa ruta federal.
Es lamentable pero está latente el riesgo de que los transportistas se vayan a un paro de labores por falta de seguridad en las carreteras. A estos extremos están llevando las autoridades a los sectores productivos. El círculo del problema era pequeño, ahora ya es un CIRCULO EXTREMADAMENTE PELIGROSO. ¿Quién reacciona primero y se ajusta a lo que le corresponde? Y no, no estoy hablando mal ni de AMLO ni de SAC, estoy hablando de nuestra realidad como ciudadanos, de esa realidad a la que nos están llevando SAC y AMLO. HASTA LA VISTA.