Paridad, diversidad, igualdad

En diversas ocasiones hemos escuchado, leído, interpretado conceptos como identidad de género, paridad de género, perspectiva de género, diversidad, igualdad y otros conceptos que al parecer han sido ya asimilados por la población, es decir, hoy, estos conceptos se encuentran aterrizados en las normas, en las estructuras operativas, instituciones y personal administrativo y operativo, pero adicionalmente se cuenta con los diseños de políticas públicas, como los planes operativos anuales, los programas especiales, entre otros. La cuestión es que, en espacios rurales, y otros, la presencia del patriarcado sigue vigente y exige su androcentrismo, su ejercicio de poder.
Tuve la oportunidad de estar en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, invitado por la doctora Elvia Higuera Pérez para la atención de dicentes que se forman para presentar sus proyectos de investigación y disertar sobre cuestiones vinculadas con el Sistema de Género, el Patriarcado y la importancia de avanzar significativamente en las cuestiones de igualdad sustantiva, la paridad, el respecto a la dignidad humana, y la justicia social. Esta acción se realiza gracias a la colaboración que desarrolla el equipo de trabajo de Michoacán de la Senadora Celeste Ascencio Ortega en favor del respeto a los derechos humanos, las libertades y la dignidad humana, al ser quien preside la Comisión legislativa de Derechos Humanos en el Senado de la República.
Desde este enfoque presente una propuesta de reflexión crítica desde el análisis de la comprensión de evitar invisibilizar la diversidad, frente a un binarismo que ha estado presente durante siglos y que ha fortalecido al patriarcado y un sistema de género construido de un binario de sexo, género y ejercicio de la sexualidad, a partir de reconocer la norma sexual, donde sexos contrarios pero complementarios generan la producción social, es decir la fuerza de trabajo para el modelo capitalista.
Derivado de los posicionamientos teóricos de diversos libros de Guillermo Núñez Noriega, entre ellos el relacionado con “Activismo social y diversidad”, en el cual se sostiene que no existía el binarismo de sexo biológico por la existencia de los hermafroditas o los llamados cuerpos intersexuales; ni de género, al existir las personas trans; tampoco del ejercicio de la sexualidad, al ser un espacio heterosexual, homosexual y bisexual; el binarismo ha sido planteado para utilizarse como mecanismos de jerarquización y desde luego como instrumento para el ejercicio de poder, y de sometimiento del mandato de masculinidad y del tributo de la feminidad a la que se refiere Rita Segato en su vasta obra literaria, entre ellos su libro “Estructurales elementales de la violencia”.
También Michel Foucault en su trilogía de la sexualidad explica estas cuestiones de lo esencialista y lo constructivista y como se ha instrumentado desde el poder el manejo de los cuerpos a través de la sexualidad. Por otro lado, B Fone, en el texto de la “Historia de la homosexualidad”, explica de manera muy concreta los procesos de sometimiento y control del cuerpo a través de la sexualidad, cuestiones eminentemente culturales, pero no esenciales. Esta manera permitió durante siglos que la mujer fuera sometida, controlado y disciplinada en su cuerpo, si bien hemos avanzado en los poderes Ejecutivo y Legislativo, faltaba el poder Judicial de llevar a cabo una reforma que permitiera que arribaran a los espacios de poder de dicha estructura la paridad de hombres y mujeres, la equidad, la paridad.
De esta manera la reforma judicial constituyó una serie de modificaciones de la Constitución mexicana y la particular de Michoacán y de diversos marcos normativos con la finalidad de que las personas, en ejercicio de la soberanía, puedan decidir mediante un derecho político ciudadano, como es el derecho al voto, elegir a las personas que queremos nos representen en el poder Judicial, que es el poder de administrar justicia. De esta manera la elección busca la justicia basada en derechos humanos, la perspectiva de género y la no discriminación.