Pago de predial y adultos mayores/Gerardo A. Herrera Pérez
Durante los primeros días del año, adultos mayores, pensionados y jubilados, asisten a las cabeceras municipales y otras localidades a las áreas recaudadoras de impuestos de las diferentes Tesorerías municipales para el pago de los impuestos, principalmente del predial y el servicio de agua potable.
Los servidores públicos que atienden las cajas registradoras, deben observar diferentes obligaciones que tienen en sus reglamentos sustantivos y asumir las obligaciones que tenemos todas las personas, de conformidad con los documentos de dimensión universal, regional, nacional y acuerdos administrativos municipales para el apoyo a grupos en condiciones de vulnerabilidad, entre ellos, los adultos mayores.
En México, nadie puede ser discriminado en razón de su edad; ningún servidor público al interactuar con un ciudadano, debe alzar la voz para dar respuesta a los cuestionamientos que le presenten, ni expresar desconocimiento de los procesos para lo cual está asignado, por lo contrario, debe brindar la información a los contribuyentes con atención, calidad y calidez y canalizarlos si es el caso, para su debida atención a las áreas correspondientes.
Es importante respetar por parte de los servidores públicos la voz de los grupos en condiciones de vulnerabilidad, en este caso, de personas adultas mayores, a la cual cada vez que no se le atiende, se le niega la voz, además de su poder como ciudadano y su valor como persona. Es decir, cada vez que un servidor público levanta la voz y no se le da la información adecuada al peticionario para satisfacer sus necesidades, estamos violentando el derecho a la información y fomentamos la discriminación de las personas por edad.
En las oficinas recaudadoras de renta de muchos municipios, estos días se vuelven complicados, así es cada año con el primer día de recaudación del pago de impuestos por parte la población y en especial de adultos mayores, pensionados y jubilados, quienes pagan sus impuestos de los predios y/o casas donde viven.
Por ello, es importante que se realicen procesos de sensibilización y respeto a los derechos humanos de los servidores públicos para brindar un buen trato a los usuarios de los servicios de tesorería y evitar caer en prácticas que pudieran ser constitutivas de violaciones a los derechos humanos de las personas en condiciones de vulnerabilidad.
El día de hoy, asistí como todos los años a pagar mis impuestos de predial en la oficina recaudadora de Manantiales del H. Ayuntamiento de Morelia, me forme como cualquier contribuyente, en una hilera de más de 40 personas; por delante de mi estaba una persona adulta mayor de aproximadamente 70 años, quien al tocarle el turno, se acercó a la ventanilla y pregunto al servidor público qué porqué del incremento del predial con respecto a 2019, en un tono poco ejecutivo pero fuerte expreso la servidor público que ella, solo cobraba el predial, que ignoraba el porqué, que eso lo debía preguntar en otra oficina, señalando adonde, sin decir el sitio; situación, que no le quedó clara a la contribuyente necesitando nuevamente preguntar porque le llego su predial más alto con respeto a 2019; ya en un tono más fuerte, le indico la servidor público que ella no estaba para dar esa información, que ya le había dicho a donde ir, que ella solo cobraba los impuestos, por lo que le apuro a que le diera el monto correspondiente, la usuaria se limitó a pagar y no preguntar, salió sintiéndose ignorada y regañada. Si bien es cierto, que la contribuyente no expreso su inconformidad, es importante señalar que no fue adecuada la atención que se brindo y que se requiere seguir trabajando en la formación de dicho personal institucional. También debo expresar que fue el único hecho que observe durante el tiempo que permanecí en la oficina recaudadora, y también preciso que todos los demás servidores públicos trabajaban con actitud y respeto, como quien atendió a quien esto escribe.
Creo que debemos comprender que los adultos mayores, requieren de una atención de respeto y de brindarles los apoyos para su cabal comprensión, para que el pago de predial no sea un calvario, sino una manera de contribuir con sus impuestos como una obligación que todos tenemos para el bien común.
Considero que aún es tiempo, si en aquellas tesorerías que no se realizaron los procesos de formación y atención al público por parte de los servidores públicos en el marco del respeto a la dignidad humana y la atención a personas en condiciones de vulnerabilidad como adultos mayores, o personas con discapacidad, mujeres en condición de embarazo y otras, se pueda realizar y evitar estos actos desagradables y que hieren la dignidad.
He tenido la oportunidad también de pagar impuestos en la Tesorería del Estado, y quiero expresar que me han atendido servidores públicos altamente eficientes y responsables, generosas del tiempo y sobre todo asertivas, como fue el caso de la licenciada Verónica Franco.
Entiendo que así como hay servidores públicos altamente capacitados y sensibilizados para dar la mejor atención y lo hacen y se desarrollan asertivamente, habrá quien requiera de procesos de formación, información y sensibilización, es cuestión de seguir trabajando en el tema de la formación de los servidores públicos y de la construcción de su discurso público que exprese su conocimiento de los derechos humanos, de la igualdad y no discriminación, de la perspectiva de género, de la interculturalidad y de la cultura para la paz.