Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
Primero los pobres, en México. La solidaridad a migrantes debe darse a quien realmente la necesita.
País lleno de pobres y la presión migrante sobre México
Es urgente definir el problema migrante frente a los grandes problemas nacionales, porque está afectando a los entornos mexicanos. No es un nacionalismo barato, sino una realidad que está a la visita: el número de pobres y de millones en pobreza extrema en México, significa que primero hay que iniciar en casa. Y dar apoyos externos a quien realmente los necesiten. Presionado por la avalancha migratoria y por un conjunto de organizaciones no gubernamentales que no siempre queda claro de donde vienen, el gobierno mexicano está haciendo cesiones que rebasan el derecho de asilo y la solidaridad. Los organismos internacionales, la ONU y su ACNUR, salieron el 18 de diciembre Día del Migrante, a dar datos que asustan de la avalancha migrante, pero fuera de ofrecer apoyos de transportes y otros secundarios, su papel se mueve en dar a conocer el fenómeno y considerar a México la principal víctima, pero no hacen nada para solucionar. Es muy tibia su postura ante Estados Unidos, causante directo de este problema. Cada día nos despertamos con una nueva marcha que atraviesa nuestro país. Los datos presentados en la fecha mencionada son agobiantes, sobre todo por la intervención del crimen en esos movimientos. Y sorprende que el 70 por ciento de esa migración tenga a la mano miles de dólares para pagar coyotes, cantidad que jamás reunirá un pobre mexicano de una sola vez. Además de que se menciona insistentemente que huyen de la pobreza. El fenómeno ha creado muchos defensores que no sabemos porque no ayudaron en los países de origen si son extranjeros y el porqué no lo hicieron con los pobres mexicanos, si son de este país. Y lo hacen con exigencias y hasta gritos. La rebeldía que han mostrado algunos grupos, golpes a los empleados del INM, marchas en la capital a su llegada, sorpresivos arribos en momentos climáticos como el de la Basílica del pasado 12 de diciembre, van creando una actitud de molestia entre la población que puede ampliarse si no se programa con seriedad el asunto ¿Quienes están atrás, clero, crimen, gente que está en contra de la 4T y quiere crear problemas al actual gobierno?
LA SOLIDARIDAD DEBE DARSE A QUIENES REALMENTE LA NECESITAN
Entre la espada y la pared, el actual gobierno está actuando con los migrantes como lo hace en el caso de ciertos movimientos feministas. No se atreve a aplicar protocolos pese a la gravedad de ciertos casos y está dando manga ancha a que esos sectores se multipliquen. El anuncio de que se consultará a migrantes si van de paso o se quieren quedar aquí, es una disyuntiva atractiva para millones que quieran tener una tierra propia en un país como el nuestro, cuando no tuvieron la capacidad ni deseos o flojera, para defender su propio territorio. Millones de mexicanos carecen de vivienda o de trabajo. El derecho de asilo es claro y tiene sus principios y siempre debe aplicarse. Pero entre los miles que entran, jóvenes fornidos y bien portados, con evidencia de una clase media, no se ve la necesidad que podemos encontrar en millones de mexicanos. Bastaría con una visita a las playas para ver a los niños que piden limosnas o trabajan en tierna infancia. O contemplar a indígenas o a muchachos muy jóvenes, haciendo malabares en las calles para sobrevivir. Si se visitan las zonas indígenas se verá la verdadera pobreza mexicana, sobre todo en Guerrero y en Chiapas.
MILLONES DE MEXICANOS NO TIENEN LAS OFERTAS QUE SE DAN A MIGRANTES
En México están desempleados más de dos millones del PEA, sin tomar en cuenta los millones que trabajan en la economía informal sin prestaciones. Y en el ejemplo de la vivienda, más de 40 por ciento no tiene casa propia y más del cincuenta por ciento no tiene acceso a hipotecas de acuerdo a Inegi. Esos problemas se vienen arrastrando en una población que la Cepal de la ONU considera de 70 millones de pobres. Inegi da datos menores. Por otro lado, miles han sido expulsados de sus regiones, como en Sinaloa y Chiapas y ahora en Zacatecas, Guanajuato y Guerrero. Toda la pobreza que se acumuló por décadas se expresa en este momento con el crecimiento del crimen en esos entornos. Hay población mexicana que necesita aquí de todo el apoyo, que entra en la ayuda perentoria que privilegia el gobierno al señalar Primero los pobres. La solidaridad a los extranjeros expulsados por gobiernos ineptos y muchos de ellos aliados a Estados Unidos, aumenta la pobreza del país. Debe ayudarse a los que realmente lo necesitan de acuerdo a la Ley sobre Refugiados, Protección complementaria y Asilo ( Diario oficial de la Federación 11 de noviembre 2020), pero a todos aquellos que van en busca de su sueño americano, debe respetarse la servidumbre de paso y permitirles un plazo aquí con condiciones. Un país con tantos problemas como el nuestro, no puede ofrecer más.