Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
EL INE y la soberbia de los organismos autónomos
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y el Instituto Nacional Electoral (INE), dos entes de los llamados Organismos Constitucionales Autónomos, han estado sujetos a discusión muy cruzada en los últimos días. Curiosamente, la polémica aunque se trata de organismos con las mismas características normativas, se enfoca en término contradictorios. Los críticos de que Rosario Piedra Ibarra presida la CNDH, hablan de subordinación al ejecutivo, en tanto que el INE, reclama su postura de coordinación para seguir adelante con el mismo y abultado presupuesto con el que ha operado. En opiniones ha planteado con cierto dejo de víctima que se ajustará a las decisiones legislativas. Ante el berrinche inicial que ha hecho Lorenzo Córdova por la disminución planteada en el presupuesto 2020, -aunque según los números se les aumentaron mil 300 millones-, sus argumentos giran en torno a que se afectarán las masivas elecciones planeadas para el 2021, cuando la intención de equilibrar se centra en parar la vida de lujo y de dispendio que ha tenido el INE en edificios, exceso de personal y altos salarios para sus consejeros. Estos últimos no han sido tocados...todavía. Ganan en salario neto 178 mil 324 pesos y bruto 262 mil mi 634, contra 108 mil 305 que gana el presidente.
LOS AUTÓNOMOS YA QUIEREN TENER SU PROPIO PODER Y VIVIR A LO GRANDE
Algunos teóricos y datos de la propia doctrina jurídica, han hecho amplios y muy profundos análisis sobre los llamados organismos constitucionales autónomos ya que aparentemente no dependen de los demás poderes y tienen una característica de coordinación. Se habla de cambios en la teoría tripartita de Montesquieu. Córdova retoma, como abogado que es, la idea de esos organismos como contrapeso, pero da un llegue cuando recalca que es contra el abuso de poder·. En ese caso el abuso vendría del poder legislativo que fue el que aprobó el presupuesto. La idea de autonomía se ramifica en México donde incluso los tres poderes constitucionales invaden sus propias esferas legislando, administrando y juzgando a la vez. La autonomía, pues, tampoco es absoluta. Hay detalles no tan pequeños que remiten necesariamente a esa teoría recogida por la Constitución mexicana y por muchas en el mundo: el otorgamiento presupuestal, la seguridad en el caso de las universidades cuando recurren a la autoridad externa, las propuestas de funcionarios, las decisiones de alzada en el poder judicial en torno a los problemas electorales, el juicio de amparo que se puede interponer contra ellos como autoridades, entre muchos. Pero uno de mayor importancia: forman parte del mismo estado que es creado en la norma fundamental como tripartito, así en ella misma se delineen los autónomos. Hay que considerar, además, que si bien esos organismos son importantes porque tienen características propias de especialización técnica y de funcionamiento, se trata de organismos burocráticos, no sujetos -como los casos del ejecutivo y el legislativo- a la elección popular. Hay una derivación de esa calidad en el nombramiento de sus funcionarios y en la fijación de su presupuesto anual. Demostración ya se dijo, de que no son tan autónomos. La pregunta que ha surgido a menudo no solo en México, es si esa modalidad está funcionando en algunos casos, como en el INE por ejemplo, cuyo presidente asumió de entrada ante la decisión legislativa, una actitud soberbia de igual a igual y esa actitud trascendió a otros consejeros. Uno de ellos, el siempre polémico Ciro Murayama, al que calló la boca Tatiana Cloutier.
MUY AUTÓNOMOS PERO LA MAYORÍA FUE PROPUESTA POR EL PODER EJECUTIVO
La exacerbada campaña contra Rosario Piedra Ibarra en la CNDH, sin que hasta el momento se le pueda presentar alguna prueba en su actividad que contradiga su independencia, la encabezan partidos cuyos defensores de derechos humanos y consejeros en el INE, fueron designados desde el poder. Se señala a la presidenta del organismo como proclive al actual gobierno por el apoyo dado públicamente y por su pertenencia a Morena. Olvidan esos críticos, los nombramientos directos que se hacían desde el ejecutivo al ombusdman del sexenio y los trajines que se daban en las cámaras para tratar de controlar al INE desde sus partidos, avalados por los nombres proporcionados por el ejecutivo en turno. Parten de lo que el león cree ¿Quien propuso a González Pérez y a Córdova, por ejemplo o a los consejeros del PAN con Fox y Calderón? Hay que tomar en cuenta además, respecto a la señora Piedra, que los requisitos de la ley que crea la Comisión no prohiben la pertenencia partidaria para su titular; como las creencias, el pertenecer a un partido son derechos de cada persona que no pueden obstaculizar la actividad, si no se mezclan.