Libros de ayer y hoy
El 25 de noviembre es la fecha que fijó en Asamblea de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en el año 2000, para conmemorar y poner énfasis en la violencia cotidiana que sufren las mujeres en el mundo y crear todas las condiciones para impedirla y denunciarla. Se fijó la fecha tomando como referencia el terrible asesinato de las tres hermanas Mirabal en 1960, por esbirros del dictador Rafael Trujillo en República Dominicana. Un caso que ha sido llevado varias veces a la pantalla por la forma como el macho asesino se lanza contra la mujer, en este caso tres jóvenes que luchaban por la democracia en su país. Una violencia que se hace extensiva al hogar, en donde se desarrollan la mayoría de los crímenes de feminicidio y agresiones cotidianas, incluyendo violación a hijas y la extensiva calidad de víctimas a los demás hijos.
EL FEMINICIDIO Y LA AGRESIÓN COTIDIANA A MUJERES, ES MUNDIAL
Los datos de la ONU y lo que se ve reflejado en libros y medios, son la advertencia para una lucha que es mundial. En México se busca la salida de esa agresión que se da en las familias, y que se agravó durante la pandemia, sobre todo en violaciones de niñas. En 2023 se contabilizaba una agresión a niñas cada cinco días. Y esa cifra se amplió este año a una agresión cada cuatro días. Las agresiones se producen en un entorno por lo general, en el que el estado que está creando mecanismos de defensa, no puede penetrar, porque es el interior de la familia. La lucha tendría que darse para transformar esta estructura, pero tiene influencias terribles, conservadoras y destructivas, sobre todo de algunas religiones misóginas. Un esperanza ha surgido en la Ciudad de México, con los datos proporcionados por Martí Batres durante su mandato, de un 68 por ciento de disminución de esas agresiones en mayo de 2024, en relación a mayo del 2023. Habrá que ver con que datos contaremos en la fecha de conmemoración de El Día Internacional de la no Violencia contra las Mujeres, de la ONU.
INDRIDASON: LA AGRESIÓN COTIDIANA A LA MUJER Y LOS HIJOS VÍCTIMAS
La novela La mujer de verde (RBA Libros 2015), ha sido una de las obras más terribles y definitivas que se han escrito sobre la violencia contra las mujeres. Publicada por primera vez en el primer año de este siglo por su autor el islandés Arnaldur Indridason fue tan espectacular que en poco tiempo se habían vendido cien mil ejemplares solo en España. El tema que entra en la serie del detective Erlendur Sveinsson plantea la violencia en el interior del hogar durante años, a niveles de gravedad física apenas tolerables, enfrente de los hijos y por cualquier detalle. La violencia se extiende para aniquilar a la mujer como ser humano que tolera la situación por sus hijos y por la pobreza circundante en esa etapa de los años entre treinta y cuarenta del siglo pasado. O sea que la violencia de género tiene una historia larga y permanente y se extiende a los seres cercanos, los hijos, para convertirlos en víctimas también y ante la agresión cotidiana, hacerlos seres tristes, desgraciados y finalmente a uno de ellos, en asesino del padre, para vengar y defender a la madre. El autor, nacido en Reikiavik en 1961, es considerado uno de los grandes talentos del género no solo como escritor, sino por lo temas críticos que trata, uno de ellos sobre los niños talentosos que son explotados públicamente. Ademá de premios sobre la mejor novela nórdica en otra de sus novelas, Las Marismas, ha recibido varios premios internacionales como autor de novela negra.