Libros de ayer y hoy
Pese a la esperanza con la que siempre luchó para solucionar el caso de las desapariciones, debe haber sido triste para Rosario Ibarra de Piedra saber que ante la cercanía de su muerte los desaparecidos en México se contaban en más de 90 mil. La cifra se remonta a varias décadas, pero se aceleraron en las etapas de Felipe Calderón Hinojosa (Fecal) y Enrique Peña Nieto, por las decisiones tomadas por el primero. Esto se ha dicho muchas veces en torno al uso del ejército con Fecal, mientras que contradictoriamente se daba la negociación con grupos del narco, ya evidenciado en el juicio contra Genaro García Luna el ex secretario de seguridad pública de Fecal. La propia ONU reconoce que las desapariciones en nuestro país tienen como principal fuente el crimen organizado. Pero la demanda de drogas del vecino país reiterada causa de ese tema, no se ataca directamente por la ONU, en ese afán de tratar a Estados Unidos con el pétalo de una rosa. Viene a México su comité especial a señalar al gobierno que solo tiene tres años y medio en el poder, mientras la demanda de drogas lleva muchas décadas. No se ve un programa especial del organismo internacional que fije la responsabilidad a la vecindad que tenemos y se va sobre una desaparición forzada que se ha tratado de controlar en este sexenio. En efecto tuvo gran despliegue en décadas pasadas y muchos de esos desaparecidos entran en las cifras que no se han podido aclarar. Rosario Ibarra, que buscó a su hijo Jesús desde 1973, presuntamente desaparecido por el ejército, se fue sin haberlo encontrado.
LA DESAPARICIÓN DE INFANTES Y LAS CAUSAS MÁS DIVERSAS DE AUSENCIAS
Las ideas del horror trascienden y hay personas y grupos de otras infracciones, que parten del ejemplo central del crimen y se suman a provocar las desapariciones. Los más terribles son los datos de los niños desaparecidos que se mencionan en más de 5 mil solo en el 2021. En las denuncias sobre crímenes, de niños sobre todo, se soslaya la muerte de menores hombres que se suman a los de adultos que en total con datos oficiales, son más del 80 por ciento con hombres y niños varones. La Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim) cifra esas desapariciones desde 1964 a la fecha en 82 mil 328, de los cuales 16 mil 378 no han siso encontrados. La Redim acusa al gobierno de Fecal de haber sido el que catapultó esa situación debido a su toma de decisiones. En este sexenio, según ese organismo, han desaparecido 19 mil 445 niños de los cuales han sido localizados alrededor de 14 mil. La desaparición de personas fuera del crimen organizado, se sitúa en problemas familiares de robo de infantes, de fuga de menores por malos tratos lo que ha llevado a los niños en situación de calle, al escape urdido por los propios niños para buscar otros entornos y está en el caso de los muy pequeños, la sustracción para subsanar carencia de hijos en parejas estériles. Además, por otro lado está la trata de menores y la búsqueda terrible de victimas para utilizar sus órganos. La mayoría de los casos son de horror. Las situaciones son muchas y a todas se les da búsqueda a veces sin resultados.
ROSA LUXEMBURGO, FAMOSA DESAPARECIDA Y EL AMOR A LOS NIÑOS
A lo largo de las épocas las desapariciones también han recaído en personajes famosos, algunos de los cuales nunca fuero encontrados. La polaca judía Rosa Luxemburgo estuvo desaparecida cuatro meses y medio hasta que se encontró su cuerpo flotando en el canal Lanwehr, cerca de Berlín, a donde fue arrojada después de su asesinato. Se le reconoció por los guantes y su vestido. La destacada comunista había estado en una manifestación contra el gobierno alemán de 1919, el que ordenó a sus guardias ya considerados pronazis, que rompieran la alzada y dieran castigos ejemplares a participantes. A Rosa le rompieron el cráneo con un arma pesada y al comunista Karl Lliebknecht lo mataron. Herida, Rosa fue conducida hacia el canal donde fue asesinada a balazos. Se le dio por desaparecida y solo la casualidad permitió encontrarla por una mujer del pueblo. En sus muchas intervenciones y en sus escritos, Luxemburgo encabezó la lucha contra un fascismo que ya se expresaba. A la par, escribía sobre los más diversos temas, entre ellos literatura. En el libro Rosa Luxemburgo, Escritos sobre Arte y Literatura (Ciudad de la Habana 1981) se refiere en el ensayo El alma de la literatura rusa, a los niños, un tema que le gustaba abordar, sobre todo a partir del trato que le daban los grandes autores rusos. Lo traigo a colación ante la estupidez humana que cancela libros, música, como acaban de hacer en Zacatecas con música de Chaikovski y otros aportes de los autores rusos. Rosa menciona en ese ensayo la “especial ternura y delicadeza” de autores como Tólstoi, Dostoievski, Gorki, Goneharov, Korolenko y otros. Al señalarlo ”como víctimas de las relaciones sociales, el mundo infantil con sus penas y alegrías se halla muy cerca del corazón del artista ruso...no con el falso tono como los adultos que creen descender las más de las veces al mundo del niño, sino con el honrado y serio tono de la camaradería, sin infundada superioridad”. Rosa fue asesinada el 15 de enero de 1919 y sepultada el 13 de junio de ese año. En ese lapso se capta el tiempo de la desaparición de esa gran mujer.