Libre expresión/Carlos Alberto Monge Montaño
¡Y todavía faltan 3 años!
“Más que la verdad, el demagogo dice lo que el público quiere oír”. José Ramón Ayllón (1955 – ). Filósofo y escritor español.
Apenas van tres años de un gobierno de palabras y no de hechos, una administración federal demagógica encabezada por Andrés Manuel López Obrador.
Tras la frustración y enojo que provocaron en la población los gobiernos que encabezaron priistas y panistas, parecía muy complicado que pudiéramos estar peor. Increíble, el inquilino de Palacio Nacional lo ha conseguido.
La gran mayoría de sus compromisos se han quedado en verborrea, escupitajos al cielo que la caen uno tras otro y todos los días en su propia cara.
Baste recordar algunos de sus compromisos para identificar el fracaso que ha representado la llamada cuarta transformación, sin desdeñar que la mitad del sexenio suele ser la mejor, dicho de otra manera, la peor de las mitades del sexenio inicia este miércoles.
Para los incrédulos o seguidores ciegos de López Obrador, recordemos 10 de sus compromisos del 1 de diciembre de 2018 y vamos a contrastarlos con la realidad.
- “Vamos a limpiar el gobierno de corrupción de arriba para abajo, como se limpian las escaleras”. / En lugar de eso, impunidad total ante trabajos de investigación que han evidenciado a sus funcionarios, amigos y familiares, a quienes ha defendido ciegamente.
- “Las compras de Gobierno se harán de manera consolidada, mediante convocatoria y con observación ciudadana y de la oficina de transparencia de la ONU”. / En cambio, ha entregado por adjudicación directa más del 80 por ciento de los contratos, sólo un 11 por ciento se han licitado públicamente y un 7 por ciento han sido por invitación restringida, como usted podrá verificar en CompraNet. Para colmo, cada que se pone en evidencia un presunto acto de corrupción, como el de los contratos de Santa Lucía, justifica, critica a quienes investigan, pero es incapaz de promover la transparencia y rendición de cuentas.
- “Con apego a mis convicciones y en uso de mis facultades, me comprometo a no robar y a no mentir”. / En los hechos, promedia más de 80 mentiras, declaraciones falsas o engañosas diarias durante sus mañaneras, como lo ha evidenciado la investigación realizada por la Consultora Política SPIN que lidera Luis Estrada.
- “En tres años quedará solucionado en definitiva la saturación del actual aeropuerto de la Ciudad de México; para entonces, ya estarán funcionando las vialidades, dos pistas nuevas y la terminal de pasajeros en la base aérea de Santa Lucía, con lo cual se salvará el lago de Texcoco y nos habremos ahorrado 100 mil millones de pesos”. / Está claro que no lo logró y para colmo, estudios de especialistas financieros hablan de pérdidas que superarían los 200 mil millones de pesos.
- “Se hará realidad el derecho a la salud. El propósito es garantizar a los mexicanos atención médica y medicamentos gratuitos… hasta que logremos a mediados del sexenio, establecer un sistema de salud de primera, como en Canadá a los países nórdicos”. / En lugar de eso, más de 15 millones de mexicanos carecen de atención en salud como señala el CONEVAL, destruyó el Seguro Popular sin tener debidamente articulado el INSABI y peor aún, López Obrador provocó un desabasto de medicamentos sin precedentes, en especial, los que necesitan los niños con cáncer.
- “Actuaré sin odios, no le haré mal a nadie, respetaré las libertades, apostaré a la reconciliación y buscaré que entre todos y por el camino de la concordia, logremos la cuarta transformación de la vida pública de México”. / Bastará con elegir al azar cualquiera de sus mañaneras para demostrar que, en este compromiso, ha hecho exactamente lo opuesto.
- “Habrá un auténtico Estado de Derecho. A nadie le estará permitido violar la Constitución y las leyes, y no habrá impunidad, fueros o privilegios”. / Evidentemente ha incumplido. Ha hecho encuestas patito, atacado a las instituciones y ordena decretos para darle la vuelta a las leyes vigentes, como el último “Acuerdo” conocido como “El Decretazo” con el que además pretende opacidad e impunidad.
- “Se acabará la guerra, construiremos la paz y buscaremos la hermandad entre todos los mexicanos”. / Se escuchó bien, pero la realidad señala que con su estrategia de “abrazos y no balazos” van más de 106 mil homicidios dolosos, está peor que su acérrimo rival, Felipe Calderón Hinojosa y su cuate Enrique Peña Nieto.
- “Mantendremos relaciones respetuosas con el Poder Legislativo y con el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo dejará de ser el poder de poderes”. / Ya sabe usted, ha hecho justo lo contrario, para muestra, pedirle a “sus diputados” que le aprueben todo sin mover una coma.
- Por si no fuera suficiente, les recuerdo que en campaña también comprometió que bajaría el precio de la gasolina, que bastaría con quitar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), que regresaría al Ejército a los cuarteles y que viviría en su casa particular porque era un exceso vivir en Los Pinos. / No bajó la gasolina, tampoco ha mandado iniciativa para quitarle el IEPS, está claro que el Ejército sigue en las calles y en muchas áreas más de la administración pública y que López Obrador optó por algo más lujoso para vivir y se instaló en Palacio Nacional.
Ni hablar, como dice una cosa dice la otra… y todavía faltan 3 años.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.