Libre expresión
Sospechosa complacencia.
“La verdad se corromte tanto con la mentira como con el silencio”. Cicerón (106 a.C. – 43 a.C.) Político, filósofo y escritor romano.
La construcción de los distribuidores viales de Morelia en las salidas a Salamanca y a Mil Cumbres apesta a corrupción, han participado tres gobiernos con resultados vergonzosos, debieron estar listos en abril y ni siquiera hay transparencia.
En días pasados, la diputada local perredista Guadalupe Díaz Chagolla señaló que la administración de Alfredo Ramírez Bedolla, pese a los evidentes retrasos y como lo advierten los informes del Fondo Mertropolitano, les siguió pagando a las constructoras.
En respuesta, en su mañanera de los lunes, Ramírez Bedolla, sin documentos de por medio y sin datos precisos, se limitó a decir que el gobierno de Silvano Aureoles Conejo pagó el total de los recursos federales y criticó que salgan “voceros” del gobierno anterior a dar información.
Sin embargo, la abrumadora realidad retratada los reportes del Fondo Metropolitano que se pueden revisar en la página de internet del Gobierno de Michoacán señalan lo siguiente:
Distribuidor Vial de salida a Salamanca:
- Costo contratado superior a 487 millones de pesos. De los cuales, 445 millones son federales y 50 millones estatales.
- Al corte de septiembre de 2021 cuando terminó el gobierno de Silvano Aureoles, se informó un avance físico del 70% y financiero del 94%
- Mientras que, al corte de septiembre de 2022, ya con un año del gobierno de Alfredo Ramírez, el informe señala un avance físico del 85% y financiero del 100%.
Distribuidor Vial de salida a Mil Cumbres:
- Costo contratado de 430 millones de pesos, de los cuales 380 millones son federales y 50 millones estatales.
- Al corte de septiembre de 2021 cuando terminó el gobierno de Silvano Aureoles Conejo, se informó un avance físico del 45% y financiero del 72%
- Mientras que, al corte de septiembre de 2022, ya con un año del gobierno de Alfredo Ramírez, el informe señala un avance físico del 86% y financiero del 99%.
Si los reportes del Fondo Metropolitano que tiene publicados la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas son ciertos, entonces Ramírez Bedolla mintió en sus dichos del pasado lunes. Una vez más, le están poniendo zancadillas al gobernador o miente con alevosía y ventaja.
Debido a la evidente rivalidad de Alfredo y Silvano, desde hace un año parecía sencillo que el actual gobierno diera un informe puntual de los distribuidores viales, con documentos en mano, pero no lo han hecho, insisten en dejarlo en dimes y diretes.
La ejecución de estas obras apesta a corrupción. No se puede perder de vista que las iniciaron en el momento previo al proceso electoral, cuando los partidos y sus candidatos ocupan dinero y en especial en efectivo.
No se puede menospreciar la sospecha que prevalece respecto a que los empresarios que “ganan” licitaciones para ejecutar obra pública deben pagar a los gobiernos que los contratan el llamado diezmo.
En el caso del distribuidor vial de salida a Mil Cumbres en Morelia, pese a que los empresarios le han dado atole con el dedo a las autoridades estatales, no pasa nada, no hay advertencias, ni siquiera han sido capaces de hacer públicas y con detalles el número y montos de las sanciones ante los incumplimientos.
Al contrario, cada que asiste el gobernador o el secretario de Obras Públicas José Zavala Nolasco a supervisarlo, celebran el mínimo y retrasado avance. Ha sido tan grotesco el incumplimiento que incluso Zavala Nolasco comprometió que estaría terminado en septiembre pasado.
Los dueños de las constructoras algo hicieron bien con los gobiernos de Andrés Manuel López Obrador, Silvano Aureoles Conejo y Alfredo Ramírez Bedolla, para que les sigan dando trato, como si fueran en tiempo y forma.
Indudablemente la sospecha de corrupción está debidamente fundamentada, como lo está la expectativa de que tampoco habrá rendición de cuentas. ¡Pobre Michoacán!
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.
