La Tierra debe vivir/Gerardo A. Herrera Pérez
Desde la Revolución Industrial, ya más de dos centurias, la Madre Tierra ha sufrido los devastadores efectos de un modelo económico e individualista que lo que busca es la ganancia a costa del manejo utilitario de la Naturaleza y la Tierra y desde luego de controlar a los individuos; no importa el medio ambiente, la biodiversidad, ni mucho menos los seres vivos, la idea central es producir y vender, consumir, ser hedonista, narcisista, de valores líquidos y en busca del éxito, de la meritocracia, del lujo, los sistemas verdes no sirven más que para tomarse la foto, cuando se va de día de campo y nada más.
Pese a esa situación miles de personas: mujeres, niñas, hombres, niños, adultos y muchos jóvenes están restaurando los sistemas vivos con su participación permanente, diría yo diaria: como Deportistas con causa en Lázaro Cárdenas que mantienen limpia la ciudad, realizan actividades deportivas, ejecutan acciones para el embellecimiento del Malecón Viejo con plantas de buganvilias y recuperan espacios para los niños y niñas y colocan columpios de manera conjunta con algunos padres de familia, o la recientemente escultura de desperdicio de metales que fue realizada por Carlos García, y que protagoniza a una Sirena con materiales recuperados de chatarra. La Sirena ahora también tiene una leyenda, es la Ecoconciencia, en el cuidado y reciclado de los materiales que son chatarra.
También en Lázaro Cárdenas, Sergio Omar García, embajador líder mundial de la Paz, trabaja en un proyecto de embellecimiento de las comunidades rivereñas del Pacífico, en donde los niños a través de ejercicios libres estéticos elaboran verdades obras de arte sobre el cuidado del medio ambiente, mantener limpia sus comunidades, mantener la salud, y sobre todo embellecer a sus lugares de origen.
En Apatzingán, a través de la organización Por amor a mi tierra Apatzingán y los niños y niñas parlamentarias, se ha logrado integrar e impulsar acciones para el desarrollo de la Ecoconciencia, por lo cual se han hecho eventos en plataforma digital, caminatas, posicionamientos y otros elementos que nos permiten ir construyendo acciones para la Paz y el cuidado del medio ambiente, la biodiversidad y desde luego a la Tierra.
En Uruapan de manera coordinada con el representante de Rio Volga, del oriente de la ciudad de Uruapan, Pedro Cantú, así como Gerardo Zepeda de la Colonia Ejidal Lázaro Cárdenas, se llevan a cabo acciones para la reforestación, forestación, cuidado, limpieza, atención, y promoción de la conciencia social y Ecoconciencia de la población para el cuidado y la protección de los humedales y del Parque Urbano Ecológico de Uruapan, en donde este 22 de Abril, Día de la Tierra, se realizará un programa consistente en la limpieza de la zona del Parque, conferencias sobre la Educación Holística, Debates y convivencia con la comunidad, acciones que iniciaran a las ocho de la mañana, así que todos y todas invitadas a tan importante actividades que refleja la oportunidad de ser naturaleza.
En tanto que en Morelia y otros ayuntamientos, se vienen trabajando en plataformas digitales cuestiones relacionadas con el cuidado del medio ambiente y la biodiversidad, entre ellas, algunos de los objetivos de la Agenda 2030 de la ONU.
La Tierra nos convoca a que actuemos ya, derivado de; mantos friáticos devastados, contaminados, lagos que están secos y en deterioro permanente por su sobreexplotación; playas y océanos con plásticos y el agua de mar ácida. Calor por el cambio de uso de suelo; decenas de incendios forestales, no dan tregua al personal institucional ni a los voluntarios de apagar un incendio de bosque, cuando ya hay otro, todo por la ambición de más huertas de aguacate, en muchos casos. Pero calor y sequía, versus, los ciclones y las inundaciones en el sur del país, es decir, de todo por haber alterado los ciclos de vida de la Madre Tierra. Pero más, la pandemia del Covid-19; la producción agrícola y ganadera intensiva, devastando fronteras agrícolas o forestales para el pastoreo de los animales o producción con paquetes tecnológicos de alta contaminación a la tierra.
Por lo que es fundamental seguir trabajando en difundir la importancia de los ecosistemas que sustentan la Tierra. Por lo que nos debemos de recordar todos y todas, que debe haber armonía entre la Naturaleza y la Tierra y para haberla se requiere de un modelo económico que no devaste, que no utilice a la Naturaleza en función de un fin económico, al contrario que funcione tanto para las personas como para el planeta, es decir impulsemos la unicidad, la armonía, la complementariedad que genere las condiciones entre la Naturaleza que es vida y la Tierra que nos da las condiciones de vida.
Por eso, continuo permanentemente en un grito de alerta, un grito de Ecoconciencia, que nos permita, respetar la unicidad de la madre Naturaleza y sus seres vivos y a la madre Tierra y sus elementos el agua, la tierra, el aire y el sol, la energía.