La discapacidad y su liderazgo

Todas las normas, generalmente son redactadas en forma de principios, así poco nos expresan qué es la discapacidad y como se atiende desde una complejidad, pese, a ello, quienes viven la discapacidad saben qué es; por ello, en este Día Internacional de las Personas con Discapacidad, no solo es una fecha especial para recordar las grandes deudas que se tienen en distintas estructuras sociales con quienes viven la discapacidad, ya desde la normatividad, las instituciones y la sensibilización del personal institucional, así como un diseño de política pública que se opere a partir de dicha vocación de servicio de los operadores de las instituciones.
En mi desarrollo profesional y en el ejercicio del trabajo comunitario, me ha tocado coadyuvar a procesos sociales de progresividad de los derechos humanos de las personas con discapacidad, todo ello, me ha sensibilizado y me ha permitido llevar un mensaje inclusivo en las diferentes intervenciones que realizo a lo largo del Estado de Michoacán y otras entidades de la República, incluidas las disertaciones a través de plataformas que tienen una dimensión planetaria.
Al parecer cada año en este día surgen diferentes posicionamientos tanto sociales, como institucionales, la cuestión es complementar los esfuerzos de ambos en gobernanza para avanzar significativamente en una agenda que reordene y recupere las expectativas y necesidades sentidas de la población que vive con discapacidad.
Desde la plataforma de la Convención de los derechos de las personas con discapacidad y su protocolo de actuación, así como sus instrumentos del mecanismo de seguimiento internacional, nacional y local y demás instrumentos normativos de política pública es importante atender a los liderazgos sociales, ver sus interseccionalidades y profundizar en sus problemáticas de salud, educación y trabajo.
Hoy, como deberá ser mañana y el día que sigue y las próximas semanas y meses, debemos de abrazar como sociedad y sus instituciones que las personas con discapacidad disfruten de los derechos humanos, las libertades, las oportunidades que den viabilidad al respeto a la dignidad humana, sin discriminación, sin violencia, sin exclusión, con plena justicia social.
Desde 1945 la ONU y en general los países miembros, avanzar en pilares de: la Paz, el desarrollo, así como la seguridad y desde luego vivir plenamente los derechos humanos y las libertades, aun cuando exista una lucha social permanente por alcanzarlos, y sobre todo el desarrollo humano, traducido como lo exprese ya en educación, salud, trabajo, organización social, derechos sexuales y derechos reproductivos, ejercicio pleno del derecho al libre desarrollo de la personalidad, entre otros.
Para ello, requerimos dinamizar los marcos normativos ya existentes, ninguna letra a favor de la discapacidad debe estar estática, todas deben ser dinámicas, avanzar significativamente en la progresividad de los derechos humanos, sobre todo el cumplimiento de la Convención de los derechos de las personas con discapacidad, la instrumentación de la Agenda 2030 de la ONU, así como la Agenda para la Humanidad, y desde luego el Marco de Sendái para la reducción del riesgo de desastres, como lo que recientemente viven nuestros hermanos de Acapulco con el Huracán “OTIS”
Para realizar las tareas que como sociedad y gobierno en gobernanza debemos impulsar para la inclusión de las personas con discapacidad, y a las que nos convoca la ONU y nuestro gobierno, es una estrategia basada en cuatros enfoques globales, o como se dice desde la complejidad, lo glocal; primero fortalecer los liderazgos, de los personal y lo social; segundo la participación en el diseño de la política pública para la atención de las personas con discapacidad, renovación de los cuadros y cambio generacional para revitalizar la gestión social e institucional; tercero, inclusividad, es decir, revisar las estructuras, la infraestructura y la superestructura para el entendimiento de procesos holísticos, sistémicos e interdependientes que nos ayuden a entender al sujeto con discapacidad de derechos humanos y finalmente, el cuarto aspecto, impulsar servicios y programas pertinentes, que acompañados de los apoyos institucionales que desde luego aplaudo de este gobierno por la importante redistribución de la riqueza nacional, sigan en progresividad pero ahora en la búsqueda de hacer posible plazas de trabajo en la industria y los servicios, así como la participación política en los espacios de la toma de decisiones.
Mis felicitaciones por el arduo trabajo realizado por las comunidades de personas sordas, personas ciegas, personas silentes, personas con discapacidad intelectual, y en general aquellos liderazgos que atienden las problemáticas de las personas que viven con discapacidad, como Ángel de Corazón porque te nace ayudar, A.C..En estos años me ha tocado acompañar a grandes mujeres que encabezan movimientos sociales de personas con discapacidad: Dela Cruz, mi amiga (QEPD), Liz Vega, Saúl Pérez y Yareni, Malena Silva Montes insustituible liderazgo social, Carmen y Mariana, nada podría comprenderse de las personas de talla baja, sin ellas; Silvia Gaona y Javier “el gran Don Javis”, mi ahijado, las Guías sombras una oportunidad de vida, gracias por tanto señora Silvia; Claudia Zúñiga, recientemente reconocida por su extraordinario trabajo, Luis Ventura de la Rosa, siempre impulsando procesos de inclusión, Gabriel Mora, insustituble liderazgo, Rigoberto, el gran Rigo, el cuidador de la Plaza de Armas, gran deportista paralimpico, Chema y el gran Sinhué con su torito de petate, Miguel Ángel Martínez y movimiento social, la Señora Eréndira Guerrero y su hijo, grandes personalidades, grandes liderazgos y grandes promotores de la cultura de la discapacidad, un honor saberme cercanos a ellos, un honor saberme que en algo puedo coadyuvar a sus proyectos de vida y sociales. Que viva la cultura de la discapacidad, la cultura de la Paz, la cultura de la Inclusión y la convivencia social.